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Cuando un perro inclina la cabeza o no puede mantener los ojos quietos, estos suelen ser síntomas del síndrome vestibular.
Montarse en el tiovivo es divertido, pero estar demasiado rato te revuelve el estómago. Algo parecido les pasa a los perros que sufren la enfermedad vestibular. Te explicamos qué es el síndrome vestibular en perros y si se puede curar.
El síndrome vestibular en perros es una alteración del órgano del equilibrio. Aunque los síntomas parezcan graves, esta enfermedad no es peligrosa a priori.
Sin embargo, no hay que subestimar las causas subyacentes y se debe tratar a tiempo.
¿Cuáles son los perros más afectados?
Los perros mayores son los más afectados por el síndrome vestibular. No obstante, cualquier perro puede contraerlo, independientemente de la raza y el sexo.
Síntomas del síndrome vestibular en perros
El síndrome vestibular en perros se detecta claramente por los trastornos neurológicos que provoca repentinamente. Mucha gente describe el suceso como una apoplejía.
En función de la magnitud del síndrome, se pueden observar estos síntomas:
Además, es frecuente que los perros afectados tengan náuseas y vómitos. Dado que en el síndrome vestibular en perros solo se ve afectado el sentido del equilibrio, aparte de estos síntomas, que a nosotros nos asustan tanto, los perros están bien.
¿Cuándo hay que ir al veterinario?
Si los movimientos de tu perro están alterados o percibes otros cambios en su estado, debes notificárselo al veterinario.
Cuanto antes lo vea un profesional, antes mejorará su estado con el tratamiento adecuado. Según qué esté causando el síndrome vestibular en perros, las probabilidades de curación aumentan con una visita al veterinario.
Diagnóstico: ¿cómo se detecta?
Como el síndrome vestibular en perros suele ir acompañado de síntomas llamativos, los veterinarios detectan enseguida si se trata de un problema neurológico.
No obstante, hay que hallar la causa para poder combatir la enfermedad eficazmente. Para ello, el veterinario lleva a cabo varias exploraciones.
Examen auditivo
El veterinario puede averiguar si el oído del perro está inflamado observando el interior. Para hacerlo, utiliza un otoscopio, que es una lupa pequeña con luz.
Examinando distintos sentidos y estímulos del perro, como la vista y los reflejos, el veterinario obtiene información importante para localizar el problema.
Métodos de imagen
Una radiografía ayuda a identificar inflamaciones o tumores en órganos internos o estructuras óseas. Para poder observar el cerebro con precisión, a veces es necesario realizar una tomografía por resonancia magnética (TRM).
Con una TRM se puede buscar la causa del síndrome vestibular en perros.
Tratamiento del síndrome vestibular en perros
No existe ningún medicamento para tratar la enfermedad vestibular en perros. En general, el síndrome se cura al poco tiempo. En casos graves, el veterinario puede tomar medidas sintomáticas para aliviar el malestar del paciente.
Algunas de estas son:
Infusiones de electrolitos o líquidos
Administración de medicamentos, como contra las náuseas, vitamina B o Karsivan contra los trastornos circulatorios
Importante: Ten paciencia con tu perro. Apóyalo en esta etapa tan difícil y ayúdalo a comer y beber. Además, es importante tratar la enfermedad subyacente para que el perro pueda vivir una vida sana a la larga.
¿Cuándo hay que sacrificar a un perro con síndrome vestibular?
Debido al cuadro clínico del síndrome vestibular en perros, algunos enseguida se imaginan un sufrimiento casi insoportable. Muchos se preguntan si deben ahorrarle este sufrimiento al perro.
En la mayoría de perros y gatos, el síndrome desaparece por sí solo a las pocas horas o días. Por eso, solo se considera la eutanasia si el veterinario detecta una causa mortal incurable.
Causas del síndrome vestibular en perros
En la parte trasera del oído se encuentra el órgano del equilibrio, que también se llama órgano vestibular. Esta estructura vestibular desempeña un papel importante en el mantenimiento del equilibrio de los perros. Si está alterada, se produce el síndrome vestibular.
El origen no siempre es fácil de detectar. Es habitual que aparezca en perros mayores, por lo que los veterinarios también denominan forma idiopática a la forma geriátrica.
Independientemente de la edad, los perros también pueden desarrollar el síndrome vestibular si un factor externo o interno daña parte del sistema vestibular o las estructuras asociadas. Se distingue entre síndrome vestibular periférico y central.
1. Síndrome vestibular periférico
El síndrome vestibular periférico designa la forma de la enfermedad debida a un daño del propio órgano del equilibrio.
Se ven afectados principalmente el oído interno y el octavo nervio craneal (nervio vestibulococlear). Las posibles causas son lesiones o inflamaciones.
2. Síndrome vestibular central
El síndrome vestibular central aparece cuando se dañan los cuatro núcleos vestibulares del cerebro.
Las causas posibles son cánceres o enfermedades infecciosas, como el moquillo. Sin embargo, los trastornos neurológicos en perros también pueden explicarse por una intoxicación con medicamentos o toxinas vegetales.
Pronóstico: ¿tiene cura?
En la mayoría de casos, el síndrome vestibular en perros desaparece tan rápido como aparece. No obstante, lleva a tu perro al veterinario para descartar enfermedades graves.
Prevención: ¿se puede proteger a los perros del síndrome vestibular?
No existe ninguna protección eficaz contra el síndrome vestibular en perros. Básicamente, lo único que puedes hacer es favorecer la salud de tu perro tanto como sea posible.
Por ejemplo, procura mantenerlo en forma y alimentarlo de forma saludable. Llévalo a pasear regularmente y estimula su cerebro con juegos divertidos. Los deportes caninos también son una buena manera de mantener el cuerpo y la mente en forma.
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