Picadura de abeja en perros: ¿qué hay que hacer?

Estás tumbado/a en el jardín, tu peludo está olisqueando las flores como de costumbre, y de pronto, oyes un aullido. Tiene una picadura enrojecida en la nariz, que probablemente sea de abeja. Pero ¿qué hay que hacer cuando nos encontramos con una picadura de abeja en perros?

¿Es peligrosa una picadura de abeja en perros?

Por suerte, la mayoría de abejas solo pican a los perros en la piel. Si bien la picadura es dolorosa para el perro, no suele ser peligrosa. Sin embargo, si le pica en el hocico o en las fauces, la situación puede ser mortal.

Síntomas: ¿cuáles son los signos de una picadura de abeja en perros?

Los signos clínicos de los perros picados por abejas varían de una zona de picadura a otra. Lo más llamativo es el aguijón, que se suele quedar clavado intacto en la zona inflamada.

A veces, una abeja también puede volar sin querer hasta el hocico del perro. Si este se la traga, la abeja, presa del pánico, le clava el aguijón. Como las mucosas del hocico y las fauces son mucho más sensibles que la piel exterior, pueden producirse complicaciones peligrosas. Estas pueden ser, por ejemplo:

• Inflamación severa de las mucosas
• Problemas respiratorios con ataques de asfixia e incluso disnea
• Debilidad física e incluso pérdida del conocimiento

Si tu perro tiene una reacción alérgica a la picadura, también pueden aparecer fuertes rojeces y pústulas. Esto hace que el perro se rasque más por el picor. Además, puede que presente síntomas graves, como vómitos o diarrea.

¿Cuándo tengo que llevarlo al veterinario?

Si tu perro muestra síntomas de shock (p. ej., shock anafiláctico) después de la picadura, llévalo inmediatamente al veterinario. Esto es importantísimo porque, si se le inflaman las vías respiratorias, podría morir.

Shock en perros picados por abejas: medidas de primeros auxilios

Con una picadura de abeja en perros, lo primero es mantener la calma. Solo si estás tranquilo/a podrás ayudarlo y tener la situación bajo control. Sigue las instrucciones siguientes para prestar a tu perro primeros auxilios en caso de shock:

1. Si puedes, pide ayuda a otra persona para que tranquilice y sujete al perro. Si estás solo/a, deberás ponerle la correa. Si tu perro es asustadizo y tiene mucho dolor, también deberás ponerle un bozal. Incluso los perros más cariñosos pueden morder a su cuidador en estado de dolor o shock.

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2. Ahora, coloca al perro en una posición lateral estable. Primero, colócate en el lado derecho de su cuerpo. Por encima del lomo, agarra una pata delantera y otra trasera. A continuación, apártalas con cuidado. Deja que el perro se deslice lentamente hacia el suelo, a ser posible apoyado en otra persona o contra la pared, para poder colocarlo sobre el lado derecho de forma segura. Ponlo de manera que la columna quede recta y las patas, extendidas.
3. Si tu perro ha perdido el conocimiento, estírale la cabeza hacia atrás y sácale la lengua por un lado. Con un cojín o una chaqueta puedes elevarle las caderas para favorecer la circulación en caso de shock anafiláctico.
4. Ahora, llama de inmediato al veterinario. Si no puede venir a casa, el perro deberá seguir en posición lateral estable durante el transporte. Las mantas térmicas ayudarán a calentarlo temporalmente. También debes controlarle la respiración y el pulso.

Tratamiento: ¿qué tratamientos existen?

Cuando una abeja pica, su aguijón con veneno se queda clavado en la víctima y ella muere. Por eso, con una picadura de abeja en perros —a diferencia de otras picaduras de insecto, como de avispones, abejorros o avispas—, debes buscar y extraer el agujón con unas pinzas.

Si la abeja le ha picado en la pata o en el labio, puedes enfriar la zona con agua fría, toallas húmedas o un acumulador de frío envuelto en toallas. Si la picadura está en la boca, puedes darle cubitos de hielo para reducir el dolor y la inflamación. También puedes aplicarle pomadas especiales en la picadura para aliviar el dolor.