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Los collares isabelinos evitan que un perro se lama un eczema.
Si no se trata, la dermatitis húmeda puede volver una y otra vez. Pero ¿qué es exactamente la dermatitis húmeda en perros y cómo la contrae el perro de nuevo? Aquí encontrarás la información más importante.
La dermatitis húmeda, o dermatitis piotraumática, también se conoce con el término inglés hot spot, que significa punto caliente. Designa una inflamación superficial y exudativa de la piel. Aunque el tratamiento suele ser laborioso y largo, la dermatitis húmeda en perros no suele ser mortal.
Como la dermatitis húmeda no es una enfermedad independiente, no es automáticamente contagiosa para perros, otros animales ni personas. Todo depende siempre de la causa exacta.
Si se trata de una causa infecciosa, como parásitos u hongos, estos podrían transmitirse a otros animales o personas. Esta es otra razón para que el veterinario trate la inflamación lo antes posible.
Un eczema húmedo suele ser una inflamación cutánea circular, roja y superficial. Está claramente delimitado de las zonas sanas circundantes.
Sin embargo, como se esconden debajo del pelo, las zonas de piel afectadas se inflaman muy rápido. Por lo tanto, un hot spot en perros puede avivarse en pocas horas e ir acompañado de estos síntomas:
Dado que la dermatitis húmeda en perros puede provocar un fuerte picor, el perro entra en un círculo vicioso al lamerse las heridas.
En la saliva hay muchas bacterias que penetran en la herida y ocasionan una nueva inflamación. Así pues, estos eczemas reaparecen una y otra vez, aunque estén empezando a curarse.
Una dermatitis húmeda en perros no tratada puede provocar fuertes y dolorosos focos inflamatorios. En casos aislados, también pueden verse afectadas capas más profundas de la piel.
Esto aumenta el riesgo de una septicemia bacteriana. Esta va acompañada de fiebre y malestar general, pero también de posibles complicaciones graves, como trastornos de conciencia y shock.
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La dermatitis húmeda es una enfermedad cutánea frecuente que pueden contraer todos los perros. Sin embargo, los más afectados son los de pelo largo y grueso, como el golden retriever, el terranova y el boyero de Berna. Las heridas suelen aparecer cerca de la oreja, en el torso y en la parte delantera de las patas.
Si detectas alteraciones patológicas en tu perro, es mejor que lo lleves al veterinario preventivamente. También debes llevarlo si tiene la piel inflamada o se le cae el pelo. Recuerda que la mejor manera de ayudar a tu perro es haciendo que lo examinen a tiempo.
Por las características externas de la dermatitis húmeda en perros, los eczemas son relativamente fáciles de detectar para el veterinario. Sin embargo, este examinará la herida ampliamente para descartar otras posibles enfermedades, como una infestación fúngica.
Para ello, realizará un frotis de la herida con un hisopo esterilizado y lo colocará en un portaobjetos. Bajo el microscopio podrá distinguir entre bacterias y hongos por medio de las distintas características de cada uno.
Las bacterias que son responsables con mayor frecuencia son los estafilococos. Son un componente importante de la flora cutánea del perro y, por eso, llegan rápidamente a la herida.
Además de las bacterias, también aparecen células inflamatorias redondas, como los granulocitos neutrófilos. Estos pertenecen al sistema inmunitario congénito. Su tarea consiste en encontrar los patógenos y destruirlos.
Como la dermatitis húmeda en perros tiene la particularidad de volver tras haber empezado a mejorar, el tratamiento es laborioso. Por eso, la higiene de la herida debe ser larga (hasta tres semanas) y periódica (al menos cada dos días).
Si tu perro tiene mucho dolor, el veterinario puede aplicar anestesia o un sedante en las primeras sesiones. A continuación, realizará lo siguiente:
Deberás repetir estos pasos regularmente en casa. El veterinario te dará un plan de tratamiento detallado.
Si la dermatitis no mejora, habrá que aumentar la frecuencia del tratamiento o realizar un examen bacteriológico y un test de resistencia. Esto permitirá al veterinario combatir las infecciones bacterianas local y sistémicamente con antibióticos.
Además, puede que sean necesarios corticoides bajo la supervisión del veterinario para aliviar la inflamación.
Si la herida se cura, es importante no terminar el tratamiento bruscamente. Además, hay que evitar que el perro se lama la herida, haciendo que penetren nuevas bacterias. Para ello, puedes ponerle un collar isabelino o un bozal por la noche.
Como las altas temperaturas y la humedad favorecen las inflamaciones, estos eczemas suelen aparecer en verano. No obstante, hay otros factores que pueden propiciar la dermatitis húmeda en perros. Estos son, por ejemplo:
Una de las causas más frecuentes son los mordiscos de pulgas, es decir, la alergia a la saliva de pulga. El fuerte picor que provocan los lamidos hace que la herida superficial se infecte rápidamente de bacterias y se inflame.
Una infestación de ácaros del oído también puede ocasionar un fuerte prurito y, por tanto, un eczema húmedo en perros.
Las inflamaciones cutáneas superficiales también pueden aparecer por otras enfermedades que provocan prurito, como las infecciones fúngicas. Los perros de las protectoras y los callejeros suelen ser los más afectados.
Las alergias también son famosas por causar picor. Ya sea una alergia alimentaria o una reacción alérgica por contacto (p. ej., a plantas), hay muchos alérgenos que pueden provocar hot spots en perros.
Un cuidado inexistente o insuficiente del pelaje también puede provocar picor y las reacciones inflamatorias asociadas. Esto afecta principalmente a perros mayores o animales callejeros.
Una lesión traumatológica también puede provocar dermatitis húmeda en perros si el animal se lame, rasca o muerde la herida. Esto puede ocurrir incluso por dolor en los músculos o huesos subyacentes.
Si la dermatitis húmeda en perros se cura o no depende en gran medida del tipo y frecuencia del tratamiento, así como de las bacterias implicadas. Con un tratamiento correcto, estos eczemas se suelen curar en unas semanas.
No siempre se puede impedir la aparición de una dermatitis en perros. No obstante, con los consejos siguientes podrás reducir el riesgo:
Si tu perro ya ha tenido dermatitis húmeda, puedes prevenir futuras inflamaciones con champús especiales para perros. Sin embargo, recuerda que bañarlo con demasiada frecuencia tiene el efecto contrario y puede favorecer una dermatitis.
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