El spitz alemán es una raza de perro muy conocida. Pero ¿sabías que existen cinco variantes? Te presentamos dos de ellas: el spitz alemán pequeño y el spitz alemán mediano.
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Como todas las variedades de spitz, el pequeño y el mediano tienen el aspecto típico de los spitz.
El nombre spitz está documentado desde el siglo XVIII y se debe al aspecto de estos perros: orejas y hocico puntiagudos, que es lo que spitz significa en alemán. Como todas las variedades de spitz, el pequeño y el mediano tienen el aspecto típico de los spitz. La única diferencia es su tamaño.
Las características de los spitz pequeños y medianos son:
Las variantes pequeñas de spitz se tenían en granjas principalmente como ratoneros y anunciaban a los extraños con fuertes ladridos.
El spitz alemán pequeño y el spitz alemán mediano se diferencian más en el tamaño y menos en el carácter. Dado que son antiguos perros de granja, son muy territoriales. Por eso, un spitz informará de cualquier cosa inusual que oiga y vea en su territorio.
Estos peludos también entablan vínculos estrechos con sus humanos. Los desconocidos, en cambio, despiertan sus sospechas. Un spitz nunca es el favorito de todos, como un golden retriever, por ejemplo.
Incluso los congéneres que entran en el territorio de los spitz pequeños y medianos son recibidos con escepticismo… y ladridos. Además, su pequeño tamaño no les impide mostrar una enorme confianza en sí mismos. El instinto de caza, en cambio, apenas está presente.
Estas dos variedades del spitz alemán son dóciles, inteligentes y despiertas. Por lo tanto, con un poco de paciencia y constancia, enseñarles el abecé canino no supone ningún problema. Una vez que hayan entendido lo que quieres que hagan, estarán encantados de obedecerte.
Puede que merezca la pena acudir a una escuela canina cuando el perro es aún cachorro. Allí, los peludos aprenden a llevarse bien con otros perros de diferentes tamaños. Este es un buen entrenamiento para que, en el futuro, tu spitz no ladre injustificadamente cuando vea a otro perro.
Hablando de ladridos: también debes ser listo con este adiestramiento. Deben poder ladrar cuando perciben algo, pero no con estridencia. Si un spitz está aburrido, su umbral de inhibición de los ladridos disminuye. Por lo tanto, para educarlos, darles una ocupación adecuada a la especie es un requisito imprescindible.
Muchos spitz entablan lazos estrechos con su persona de referencia. Por eso, es muy importante enseñarles a quedarse solos durante breves periodos de tiempo cuando todavía son cachorros.
Más consejos sobre el adiestramiento del spitz: Mi perro ladra mucho: ¿qué hago?
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A diferencia de las variantes más grandes, el spitz grande y el keeshond, los pequeños y medianos también son aptos para vivir en la ciudad. Para ellos, lo importante es estar en el ajo.
El spitz alemán pequeño y el spitz alemán mediano tienen un pelaje abundante. Debes cepillarlo regularmente desde cachorro, ya que el suave pelaje de los perros jóvenes tiende a enredarse. Además, si acostumbras a tu perro al cuidado del pelo desde joven, lo tolerará más fácilmente en el futuro.
El spitz adulto es menos exigente en cuanto al cuidado: normalmente basta con cepillarlo dos veces por semana. Si favoreces el cambio de pelaje con el cepillado diario, la casa se llenará menos de pelos.
Como el pelaje debe ser más bien duro, y no algodonado, el cepillado de la mayoría de spitz es sencillo. Vigila las zonas que se enredan fácilmente, como las axilas.
Si tu peludo se ensucia, solo debes lavarlo en caso de necesidad con champú para perros. Por lo general, basta con peinar la suciedad seca o limpiarle un poco las patas con agua limpia.
Las dos variedades del spitz alemán son adecuadas tanto para principiantes como para expertos. Estos perros entablan vínculos estrechos con sus humanos, por lo que no deben quedarse solos varias horas con demasiada frecuencia.
El spitz alemán mediano y el spitz alemán pequeño son aptos para tenerlos en grupo. Además, son tan adecuados tanto para vivir en el campo como en un piso de ciudad. Sin embargo, en este caso deberás esforzarte por mantener el instinto de ladrido a un nivel razonable.
Son perros ideales para familias con hijos, pero también para personas solas. También son acompañantes estupendos para personas mayores a las que les guste salir a pasear con su perro.
A las variedades pequeñas de spitz les gusta moverse, pero no son precisamente deportistas de élite. Les gusta dar largos paseos por el parque, aunque haga mal tiempo. El spitz alemán pequeño y el spitz alemán mediano suelen ser juguetones y les gusta retozar en grupo. También disfrutan haciéndolo con otros perros, siempre que estos hayan conseguido ganarse su simpatía.
Introduce también retos para la mente en su rutina diaria. A estos perros les van bien, entre otras cosas, el agility para perros pequeños, los trucos o el dog dancing. Sin embargo, dado que el spitz suele ser obstinado, deberías centrarte más en divertiros juntos que en competir.
Las variedades de spitz mediano y pequeño son perros robustos sin apenas problemas de salud. Antes de la cría, los criadores serios les revisan las articulaciones de las rodillas para descartar una luxación rotular.
Pocos nacen con predisposición a alopecia hereditaria, que empieza a presentarse entre los dos y los seis años de edad. En las zonas afectadas, la piel suele presentar una pigmentación negra, por lo que esta alopecia X también se conoce como enfermedad de la piel negra. Investigadores de Berna están intentando aislar los genes responsables, de modo que probablemente habrá pruebas genéticas en un futuro próximo.
Dale a tu perro una alimentación de calidad y asegúrate de que mantenga un peso saludable: la cintura debe apreciarse bajo el pelaje. Cuando los spitz están sanos, se mantienen juguetones y en forma hasta la vejez.
La esperanza de vida media del spitz alemán pequeño y el spitz alemán mediano es de 13-15 años.
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Mientras que los spitz pequeños están algo más extendidos, los medianos están catalogados incluso como raza doméstica amenazada.
El spitz alemán es un perro de granja típico desde hace siglos. Durante mucho tiempo se creía que esta raza descendía del perro de las turberas, pero esta teoría se considera obsoleta.
A lo largo del tiempo se han desarrollado cinco variedades a partir del spitz alemán. Además del spitz mediano y pequeño, existen el spitz grande, el aún más grande keeshond y el pomerania, también llamado spitz enano.
El spitz grande y el mediano aparecen en la lista de la sociedad alemana de razas domésticas antiguas y amenazadas (GEH, por sus siglas en alemán). El spitz grande se considera extremadamente amenazado, mientras que el mediano solo está clasificado como altamente amenazado.
Estos perros son más fáciles de encontrar en Alemania que en España. Según las estadísticas de la VDH, en 2019 nacieron 125 cachorros de spitz pequeño y 91 de spitz mediano allí.
Si buscas un cachorro de spitz alemán pequeño o spitz alemán mediano en España, te recomendamos que busques criadores acreditados. Algunos se concentran en dos variedades de spitz y otros solo en una.
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Un cachorro de spitz alemán pequeño o spitz alemán mediano de un criador responsable cuesta unos 1100-1500 euros.
Si te gusta el spitz alemán pequeño y el spitz alemán mediano, probablemente también te encantará el grande. Sin embargo, este es más adecuado para personas con mucho espacio y no tanto para vivir en un piso sin un jardín grande.
Una excelente alternativa es el spitz japonés blanco, un perro de compañía que derrocha simpatía. El pomerania también sería una alternativa. Sin embargo, estos perros no tienen tan buena salud como sus parientes spitz.
Quienes sepan apreciar las cualidades de vigilancia de este antiguo perro guardián, con un spitz pequeño o mediano tendrán a un simpático perro familiar y de compañía.
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