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Los perros del tipo pastor rumano de Mioritza, pastor mioritic para abreviar, son habituales en Rumanía. Allí son perros de trabajo codiciados entre los pastores. Sin embargo, son difíciles de encontrar fuera de su patria y la cría estandarizada aún está en ciernes.
El imponente pastor rumano de Mioritza presenta una altura de cruz de hasta 75 cm. No es raro que los machos sean 10 cm más altos que las hembras y, según el estándar, mucho más fuertes. Los machos pesan unos 45 kg y las hembras son más ligeras. Tiene el pelo más largo que su pariente cercano, el carpatin. Como muchos perros pastores, el mioritic también presenta un frondoso manto de pelo. La capa externa áspera tiene una longitud mínima de 10 cm y el denso subpelo es suave y más claro. El pelo de las extremidades es más corto y el de la cola es largo. En los ejemplares con manchas, el color de base siempre es blanco con manchas grises o negras definidas. Los perros monocolores son blancos o grises.
Las raíces de este perro pastor se encuentran en el entorno de los Cárpatos. En esta región de Rumanía viven tradicionalmente numerosos rebaños de ovejas, pero también lobos. Aquí es donde entra en juego el pastor rumano de Mioritza. Estos grandes y tranquilos pastores llevan siglos protegiendo los rebaños de los lobos, linces y osos solo con su presencia. En el momento de nacer la raza, la prioridad era la aptitud para la tareas de pastoreo. Sin embargo, con el paso del tiempo surgieron dos variantes con características similares: el pastor rumano carpatin y el pastor rumano de Mioritza. Como el nombre ya sugiere, el carpatin es más frecuente en las cimas de los Cárpatos. El mioritic, en cambio, se encuentra más en tierra baja. El término mioritic proviene de la palabra rumana mioritica, que significa oveja pequeña.
Hoy en día sigue habiendo numerosos perros pastores trabajando en las tierras bajas de Rumanía. Por desgracia, muchos están encadenados, lo que es lamentable, sobre todo porque les encanta vivir en manada. Mientras que la raza es muy habitual en su patria, sigue siendo desconocida en muchos otros países europeos. La cría controlada no dio comienzo hasta el siglo XX y se vio interrumpida por ambas guerras mundiales. En Rumanía existe un estándar desde 1981, redactado por la asociación cinológica del país. La FCI reconoció la raza provisionalmente en 2005 y definitivamente diez años después.
En general, el pastor rumano de Mioritza rezuma calma. Sin embargo, si acecha un peligro, reacciona a la velocidad del rayo y defiende su rebaño con valentía. Como muchos perros pastores, este también muestra una gran lealtad a su manada, con la que le encanta pasar tiempo. Además, se lleva bien con los niños, pero siempre debe tener la posibilidad de refugiarse. Es un compañero de juegos estupendo, pero no un juguete. Pese a que es muy apegado a sus personas de referencia, se muestra distante con los desconocidos. Al verlos entrar en su territorio, ladra con una voz profunda. Su conducta con otros perros también puede ser problemática, pero esto se puede corregir con una buena socialización en edad de cachorro.
Se requiere experiencia en perros y una buena dosis de conocimientos y perseverancia para tener un pastor rumano de Mioritza. Como muchos pastores, este también es un cabezota y está acostumbrado a pensar por su cuenta. Así pues, debes mostrarle claramente que tú eres el jefe de la manada con un adiestramiento firme. Aquí te ayudará el ritual del cuidado del pelaje, que deberás empezar a introducir con calma en edad de cachorro. En efecto, si se deja cepillar, también aceptará el liderazgo de quien lo cepilla; un método de adiestramiento muy cómodo. A veces, este perro necesita un poco más de tiempo que muchos otros perros. Sin embargo, una vez que lo aprenda, se le quedará grabado. Con los conocimientos básicos necesarios y el ejercicio adecuado, se convierte en un perro fiable y siempre sereno.
El pastor rumano de Mioritza es un perro robusto y un buen asimilador de comida. La demanda energética real del peludo suele encontrarse algo por debajo de la cantidad recomendada por el fabricante. Contrólale el peso regularmente para ajustar el aporte energético y elige un alimento de buena calidad con abundante carne. Dale al cachorro hasta cuatro comidas al día y redúcelas a dos cuando sea adulto. Después de comer, el perro debe descansar para hacer la digestión. De este modo, prevendrás la peligrosa torsión gástrica. Los artículos secos masticables, como orejas de vacuno, panza deshidratada y similares, son un tentempié saludable. Con unos buenos cuidados, el pastor rumano de Mioritza puede vivir doce años o más.
Conviene que acostumbres al cachorro al cuidado del pelaje para que se convierta en un ritual agradable cuando sea adulto. Cepíllalo a fondo una o dos veces por semana mechón a mechón. Durante el periodo de muda, conviene que lo hagas más a menudo para rebajar el denso subpelo y prevenir enredos. Presta especial atención a la zona de debajo de las axilas. En algunas zonas puede ser conveniente usar un peine porque el pelo es más fino aquí, pero su estructura favorece los enredos. Por ejemplo, una de estas zonas es la que rodea las orejas. Para limpiárselas, es recomendable utilizar un producto auricular especial. Si es necesario, límpiale las lágrimas con un limpiador ocular suave para perros.
Además, deberás examinarle las patas una vez por semana. ¿Tiene las uñas demasiado largas? En ese caso, algo que suele suceder con perros mayores, deberás cortárselas con un cortaúñas para perros. Si no tienes claro cómo hacerlo, pídele al veterinario que te enseñe. El pastor mioritic no necesita que lo bañen porque la suciedad se puede eliminar con un peine una vez seca.
Las actividades preferidas del pastor rumano de Mioritza son explorar territorios y proteger. En cualquier caso, deberás tener un terreno o al menos un jardín grande donde pueda pasar el tiempo a su aire. Además, necesita un vínculo estrecho con la familia y le encantan los mimitos. A este peludo le pirra dar paseos por la naturaleza, haga el tiempo que haga. Esta combinación de territorio grande y mucho contacto con la gente de su entorno, incluidos los paseos largos, es la base de su felicidad. Aparte de esto, prueba a ver con qué os divertís juntos. Eso sí, no dejes que salte ni corra demasiado cuando sea joven o no esté entrenado. En días calurosos, deja las actividades de mucho esfuerzo para las horas frescas del día. Recuerda que siempre debes aceptar el carácter independiente del perro.
Esta raza surgida a lo largo de siglos en los Cárpatos se siente en casa en paisajes extensos. Solo si tienes mucho espacio, como una granja o un terreno vallado grande, y mucha experiencia en perros deberías considerar adoptar este animal. Si no tienes un rebaño, pregúntate por qué necesitas adoptar un perro de esta raza y sé autocrítico/a. Encontrar un pastor rumano de Mioritza de cría seria está asociado a búsquedas y distancias largas. Este esfuerzo debería ser un criterio de exclusión para algunos. Al fin y al cabo, hay muchas otras razas de perros pastores más fáciles de encontrar.
El pastor rumano de Mioritza se lleva muy bien con los niños y también puede convivir con otros animales domésticos. La condición es que haya recibido antes una socialización adecuada. Es más fácil si adoptas otros animales cuando son jóvenes. Este pastor los vigilará encantado y a un gatito de esa edad le resultará más fácil acostumbrarse a este gigantón. Antes de adoptarlo, piensa en quién cuidará de él si te pones enfermo/a. En cuanto a las vacaciones, lo más fácil es que puedas llevártelo contigo. Para ello, unas vacaciones de senderismo en la montaña serían perfectas. Otra opción es dejarlo al cargo de una persona de confianza.
Además de los gastos de adoptar un perro (precio del animal, gastos de desplazamiento hasta el criador y equipamiento básico formado por comederos, collar, arnés, correa, juguetes, mantas, utensilios de cuidado y transportín), piensa en los gastos corrientes de comida, veterinario y seguro de responsabilidad civil. Hablando de equipamiento básico: el pastor rumano de Mioritza prefiere dormir en superficies duras, por lo que no necesita una cama blandita. Lo mejor es que le pongas varias mantas aisladas.
Fuera de Rumanía, esta raza es difícil de encontrar en la mayoría de los países. En cambio, en su patria hay varios criadores. Debes acudir a uno de ellos si puedes ofrecerle todo lo que necesita y quieres que sea feliz. Por desgracia, cada vez se venden más pastores rumanos como auténticos sin pedigrí en todo el mundo. En el mejor de los casos, se tratará de un peludo simpático de los Cárpatos. En el peor de los casos, será un animal enfermo y sin socializar. Este último tiene poco que ver con un pastor rumano de Mioritza de pura raza. Si quieres un cachorro, debes fomentar la cría controlada, aún en ciernes. Aquí se selecciona a los perros de manera que también puedan vivir en una familia y no solo cuidando rebaños en la vastedad rumana.
La probabilidad de encontrar un pastor mioritic adulto en la protectora o en una entidad privada es muy baja. Sin embargo, en protectoras internacionales puede que encuentres perros de este tipo. A menudo se trata de antiguos perros callejeros de Rumanía. En este caso, no esperes que el perro cumpla el estándar de la raza. Además, deberás tener la misma experiencia que con el de pura raza. Sin embargo, adoptando uno de estos perros le ofrecerás un nuevo hogar y tendrás un compañero maravilloso a tu lado.
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