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El pastor croata, o hrvatski ovčar, es un perro negro mediano y un auténtico todoterreno. Sus talentos no solo se encuentran en el pastoreo y la vigilancia, sino también en los deportes caninos. Además, es tan flexible que puede ser un perro familiar estupendo.
El pastor croata, aún muy desconocido fuera de los Balcanes, es un perro de trabajo y compañía codiciado en su patria desde hace tiempo. Y con razón, ya que ofrece todo lo que se espera de un perro. Se crio originalmente como pastor, uno que no quedaba satisfecho hasta que el rebaño estaba unido. Hoy día es un perro familiar muy sociable y apegado a las personas. De hecho, le encanta jugar con los niños y estar rodeado de su familia. Además, es muy inteligente y capta las cosas enseguida. Pone en práctica las tareas y las órdenes de sus cuidadores en menos que canta un gallo.
Su voluntad de hacerlo todo bien y su disposición a adaptarse lo convierten en un compañero fiable fácil de adiestrar. A diferencia de otros perros pastores, no tiende a cuestionar el sentido de las tareas. Al contrario, suele obedecer a su cuidador/a incondicionalmente. Ni siquiera rechaza los ejercicios aparentemente absurdos, como saltar por un neumático, que tantos otros rehúsan firmemente. El pastor croata es un perro encantador, fiel y enérgico que defiende a su cuidador/a en cualquier situación.
Todo lo cercano que se comporta el perro pastor croata con su cuidador/a se muestra de distante con los desconocidos. Al fin y al cabo, tiene un instinto protector marcado por naturaleza. Prefiere mantener a los extraños controlados y se muestra desconfiado al principio, observándolos con atención. Su confianza y fidelidad se tienen que ganar. No obstante, si nacen bebés en su familia o llega otro animal al hogar, los acepta enseguida como nuevos miembros del rebaño. Ahora tiene que protegerlos y mantenerlos unidos.
El instinto de pastoreo marcado, que nunca deja de lado, debe llevarse por buen camino con un adiestramiento firme. De lo contrario, puede intentar proteger con demasiada vehemencia en supuestas situaciones de peligro. Al hacerlo, no solo asustaría a los desconocidos con sus ladridos exagerados, sino también a su propia familia. Una buena socialización y un cuidador/a que demuestre su posición de liderazgo desde el principio son importantísimos. Además, este perro de trabajo tan temperamental necesita una tarea, incluso como perro familiar. Los perros pastores poco estimulados física y mentalmente se aburren y desarrollan manías. Una vez arraigadas, estas son muy difíciles de quitar. No obstante, con suficiente ejercicio y entretenimiento, el pastor croata se muestra muy agradecido y fiel. Con estas condiciones, no solo demuestra sus talentos en el día a día, sino también en los deportes caninos.
El pastor croata no solo destaca por su carácter cariñoso y fiel, sino también por su belleza. El pelo negro, denso y semilargo, así como su cuerpo musculoso y la cabeza puntiaguda que recuerda a un zorro le confieren una apariencia noble. Presenta una altura de cruz de 50 cm y un peso que varía entre 13 y 20 kg según el sexo. Con ello, cuenta con un formato agradable, ni muy grande ni muy pequeño.
El pelaje negro, que rara vez presenta manchas blancas, es muy suave en comparación con el de otros perros pastores. No obstante, es resistente a la intemperie y fácil de cuidar. Las excusas de por qué uno no puede satisfacer el dinamismo de su perro al aire libre no valen con este peludo. Al contrario: con sus patas musculosas, que lo hacen rápido y ágil, este perro debe estar en la naturaleza. Aquí puede desfogarse de lo lindo en paseos largos, rutas en bicicleta o deportes caninos.
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Pese a sus excelentes cualidades y su belleza, el perro pastor croata sigue siendo un desconocido fuera de su patria. Incluso a muchos amantes de los perros entendidos ni les suena el nombre hrvatski ovčar.
Sea cual sea el motivo de esta baja distribución, una historia joven no puede ser la causa. De hecho, este perro existe en Croacia desde hace más de mil años.
Como pastor de rebaños de ganado, se ocupaba de vacas, ovejas, caballos, cerdos y aves. Los arreaba eficazmente de un prado a otro, los pastoreaba y se aseguraba de que el rebaño permaneciera unido. A su mirada atenta no se le escapaba nada y devolvía a cualquier animal descarriado al rebaño en un santiamén. Con rebaños grandes que no estaban apiñados en un prado, saltaba sobre sus lomos para llegar rápidamente al otro extremo. Además, los ganaderos croatas también lo usaban como perro guardián. Se mostraba atento y valiente, pero también fiel a su cuidador/a y su familia.
Aunque el pastor croata ya se mencionaba en un manuscrito del obispo Petar de 1374, estuvo mucho tiempo criándose solo para su ámbito de trabajo. No se redactó ningún estándar que describiera su carácter, aspecto y rendimiento hasta 1951. Algunos criadores croatas se esforzaron por conseguir el reconocimiento oficial de la raza. No obstante, los difíciles tiempos políticos en la antigua Yugoslavia y las disputas asociadas acerca de la palabra croata en el nombre supusieron obstáculos insuperables durante mucho tiempo. No fue hasta 1968 que la antigua asociación cinológica yugoslava reconoció oficialmente al pastor croata. La FCI siguió su ejemplo un año después e incluyó la raza con el número 277.
En Croacia, el pastor croata es actualmente un perro familiar popular, muy flexible y sensato. Fuera de los Balcanes, es prácticamente un desconocido. Por eso, aunque creas que es ideal para ti, eso no significa que vayas a encontrar a un criador. Se requiere mucha paciencia, constancia, tiempo y dinero, ya que probablemente tengas que viajar a Croacia para conseguirlo. Si estás dispuesto/a a hacer estos esfuerzos, este perro será una opción estupenda para tu familia si sois activos y os gusta la naturaleza.
Si tienes un pastor croata, seguro que pasarás mucho tiempo al aire libre. En cambio, el veterinario lo pisarás poco, únicamente para los chequeos y vacunas recomendados. Este perro tan ágil es muy robusto y no se le conoce ninguna enfermedad típica. No obstante, para favorecer su desarrollo debes ofrecerle suficiente ejercicio, unos buenos cuidados y una alimentación equilibrada. Los cuidados incluyen el corte de uñas, la limpieza de los oídos y el cepillado del pelaje para eliminar suciedad y prevenir enredos.
En general, el perro pastor croata es muy fácil de contentar. Gracias a su buena constitución, no es necesario darle ninguna alimentación especial. Sin embargo, debes asegurarte de que la comida le aporte todos los nutrientes necesarios. Las proteínas, vitaminas, minerales, carbohidratos y fibras alimentarias permiten que se mantenga sano y activo. Los perros necesitan una cantidad y composición distintas según su edad, sexo, peso y nivel de actividad. Por eso, echa un vistazo a las tablas nutricionales o habla con el veterinario al respecto.
Independientemente de si lo alimentas con comida húmeda, pienso, comida casera o el método barf, asegúrate de que el alimento contenga entre el setenta y el noventa por ciento de carne de buena calidad. También es recomendable una proporción de verduras del veinte o treinta por ciento para aportar las vitaminas y carbohidratos necesarios. En cambio, los perros no necesitan apenas cereales. Como es lógico, el alimento no debe contener azúcar, conservantes ni potenciadores del sabor artificiales.
Además de la composición correcta, el aporte de líquidos también es importantísimo para la salud de tu perro. Si bien solo debe comer dos veces al día, el agua debe tenerla a su disposición en todo momento. Es importante que el perro beba agua, pero sobre todo si lo alimentas con pienso.
Más importante aún que la alimentación y los cuidados es la tenencia adecuada del pastor croata. Aunque son perros muy fáciles de contentar, no conocen límites en lo que a ejercicio se refiere. Así pues, su cuidador/a debe tener un terreno grande y estar dispuesto/a a pasar mucho tiempo fuera al día. Aunque no es un perro grande con su altura máxima de 50 cm, necesitarás mucho espacio para que retoce a placer. Por tanto, donde mejor está el pastor croata es en el campo y cerca de la naturaleza. En la ciudad o en un piso pequeño no puede ser feliz.
El pastor croata no es un perro de sofá, y mucho menos un perro faldero. Como antiguo perro pastor y de servicio que es, quiere trabajar. Por eso, los deportes caninos como el agility, los torneos y el mantrailing son ideales para desfogarlo física y mentalmente. Gracias a su rapidez, agilidad y facilidad de comprensión, estos perros logran buenos resultados en las pruebas de habilidad o en certámenes especiales para perros pastores. Si buscas un perro para practicar deportes caninos, el hrvatski ovčar es la elección perfecta.
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