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El kokoni es un pelo alegre y vivaracho de Grecia.
El kokoni está muy extendido en Grecia, su patria. Sin embargo, apenas se practica la cría profesional. En lugar de eso, los perros se aparean con más o menos control en la calle. Por eso, hay muchos mestizos de kokoni y un aspecto irregular de este pequeño y alegre torbellino.
El kokoni es una raza pequeña. Los machos alcanzan una altura de hombro de 24-38 centímetros y las hembras, de 23-27 centímetros. El peso de los machos es de entre cinco y ocho kilos y el de las hembras, de entre cuatro y siete.
Un rasgo típico de este perro es el cuerpo alargado. Tiene las partas cortas y fuertes, una cola muy peluda y orejas dobladas también peludas. La cabeza recuerda al teckel. El pelaje del perro kokoni puede ser de cualquier color y presentar cualquier dibujo. En el cuello, la nuca y el tronco lo tiene de longitud media. La parte posterior de las patas traseras está dotada de pelos muy largos, que se llaman pantalones.
El nombre kokoni proviene del griego y significa perro pequeño o cariño. A nivel internacional, la raza también se conoce con el nombre small greek domestic dog.
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El kokoni es un perro de compañía. Tiene un carácter apegado, cariñoso y dependiente de las personas, lo que lo convierte en el perro familiar ideal. Sin embargo, también es perfecto para singles y personas mayores.
En Grecia es una de las pocas razas que solo se tiene para divertirse, por ejemplo, para jugar con los niños.
Además, este perro asume algunas tareas prácticas en las casas y granjas. Por ejemplo, ladra con voz fuerte cuando llegan visitas. Asimismo, caza ratones, ratas y otros parásitos. En general, se lleva bien con los gatos y protege diligentemente a otros animales domésticos pequeños.
El kokoni es un perro para principiantes fácil de adiestrar porque le encanta aprender. No obstante, necesita señales claras y una firmeza cariñosa. Un kokoni mal educado o no desfogado puede convertirse en un auténtico ladrador.
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El kokoni entabla un lazo estrecho con sus personas de referencia. Requiere mucho cariño y no le gusta quedarse solo mucho tiempo. Gracias a su tamaño reducido, puede vivir en un piso de ciudad, aunque no conviene que suba muchas escaleras.
Una casa en el campo que pueda vigilar es lo que más le gusta. En efecto, le encanta estar fuera y disfruta correteando por un jardín vallado. También aprecia mucho los paseos largos y las atenciones de su cuidador/a.
Además, como se lleva tan bien con los niños, puede ser un perro de terapia o acompañar a los niños al colegio. Por ejemplo, sería perfecto para escuchar a los niños pacientemente durante las lecciones de lectura.
Los perros activos y vivarachos como el kokoni son aptos para numerosos deportes caninos. Por ejemplo, este puede practicar dog dancing y agility, siempre que los obstáculos estén adaptados a su tamaño. Además, le gusta aprender trucos y jugar con juegos de inteligencia para perros.
El pelaje de longitud entre media y larga del kokoni se debe cepillar periódicamente. Así, podrás eliminar la suciedad y los pelos sueltos, así como reforzar el vínculo entre vosotros.
Además, las orejas dobladas de este perro requieren una atención especial porque son propensas a inflamaciones. Asimismo, deberás examinar la piel del perro en busca de garrapatas después de los paseos.
En cuanto a la alimentación, este perro tan modesto no presenta grandes exigencias. Es recomendable comprar un alimento de calidad sin cereales que fomente su salud. Da igual si eliges el método barf, pienso o comida húmeda. Sin embargo, si eliges pienso, deberás comprar una variedad cuyas croquetas estén indicadas para razas pequeñas.
El perro kokoni goza de una salud de hierro. De hecho, no se le conocen enfermedades hereditarias típicas de la raza. Esto no es de extrañar, ya que, al estar tan extendido en Grecia, el patrimonio genético es amplio. Estos perros a menudo viven de forma salvaje o semisalvaje en la calle y se reproducen sin control.
Apenas se practica la cría profesional. Así pues, ni se crían características concretas ni se cruzan animales específicamente. Normalmente, son los cuidadores particulares los que regalan sus cachorros a amigos y vecinos.
En todas las razas de perro griegas están muy extendidas las enfermedades mediterráneas. Se trata de enfermedades infecciosas transmitidas por mosquitos, garrapatas u otros parásitos.
Si quieres adoptar un perro de Grecia, debes hacerle pruebas de leishmaniasis, ehrlichiosis, babesiosis y otras enfermedades mediterráneas para no introducirlas en tu país.
Como muchas razas pequeñas, el kokoni es muy longevo. Bien cuidado, puede vivir hasta dieciséis años.
La historia del kokoni es muy larga. Estos perritos vivarachos se tenían ya en la antigüedad para vigilar las casas y granjas. Por ejemplo, en jarrones antiguos se encuentran representaciones suyas. Además, se dice que el famoso filósofo y naturalista Aristóteles escribió sobre estos peludos.
Sin embargo, no recibió el reconocimiento como raza independiente en Grecia hasta 2005. De hecho, la FCI todavía no la ha reconocido. Uno de los motivos es el aspecto heterogéneo de estos animales. En efecto, existen kokonis de todos los colores, por lo que parecen más mestizos que perros de raza.
El kokoni y el alopekis, otra raza griega, se parecen mucho. Hay gente que incluso afirma que se trata de la misma raza, siendo el kokoni el de pelo largo y el alopekis, el de pelo corto.
En efecto, hay muchas coincidencias entre ambas razas en cuanto al origen, carácter y aspecto. No obstante, solo el kokoni, la variante de pelo largo, está reconocido oficialmente en Grecia a nivel nacional.
Fuera de Grecia es muy difícil encontrar un kokoni porque apenas hay criadores de la raza. Incluso en Grecia es más fácil dar con cuidadores particulares y amantes de la raza que regalan cachorros regularmente.
Si quieres adoptar un kokoni, echa un vistazo en las organizaciones de protección de animales (en el extranjero). Estas dan kokonis y mestizos en adopción al extranjero, incluidos perros callejeros.
Si quieres adoptar un perro kokoni de Grecia, debes acudir a una organización seria. El perro solo podrá entrar en el país si tiene las vacunas y los papeles en regla.
Un peludo alegre, compacto y fácil de adiestrar: el kokoni es un perro de ensueño que puede hacer muy felices tanto a familias como a singles. Si tienes suerte de poder adoptarlo, tendrás a un amigo fiel de por vida.
| Particularidades: | Raza pequeña muy extendida en Grecia. Se tiene como perro de compañía y para vigilar casas y granjas. |
| Carácter: | Apegado, bueno con los niños, cariñoso e inteligente |
| Altura de cruz: | Machos, 24-38 cm; hembras, 23-27 cm |
| Peso: | Machos, 5-8 kg; hembras, 4-7 kg |
| Pelaje: | Entre semilargo y muy largo según la zona; todos los colores y dibujos |
| Cuidado del pelaje: | Moderado |
| Ejercicio al aire libre: | Le encantan los paseos y es apto para practicar deportes caninos. |
| Perro para principiantes: | Sí |
| Ladridos: | Entre moderados y abundantes |
| Esperanza de vida: | 16 años |
| Enfermedades típicas: | Raza robusta, sin enfermedades hereditarias conocidas. No obstante, es propensa a las enfermedades mediterráneas, como la leishmaniasis, la ehrlichiosis y la babesiosis. |
| Precio: | Hasta 1000 € |
| Grupo de la FCI: | No reconocido oficialmente, aunque se clasifica en el grupo 9 de la FCI (perros de compañía) |
| Necesidad de ejercicio: | Media |
| Origen: | Grecia |
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