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Lo que más le gusta al gran cuvac eslovaco es estar fuera.
El cuvac eslovaco, o tchuvatch eslovaco, es un perro pastor de montaña de pelo blanco oriundo de Eslovaquia. Vigila la casa, la granja y el ganado, pero también es un perro familiar amante de los niños. Para que pueda desplegar sus encantos de perro de compañía, necesita una mano firme y un adiestramiento perseverante.
| Breve presentación: | El cuvac eslovaco es un perro grande y fuerte. Se crio originalmente como perro pastor, pero actualmente es un guardián vigilante y un perro de compañía perfecto para familias. |
| Altura de cruz: | 62-70 cm (machos) 59-65 cm (hembras) |
| Peso: | 36-44 kg (machos) 31-37 kg (hembras) |
| Esperanza de vida media: | 10-12 años |
| Precio: | A partir de 1000 euros |
| Carácter: | Cariñoso, sereno, vigilante, territorial, inteligente, diligente, bueno con los niños y apegado |
| Pelaje: | Largo y ondulado |
| Color del pelo: | Blanco |
| Dificultad del adiestramiento: | Media |
| Dificultad del cuidado: | Media |
| Necesidad de ejercicio: | Media |
| Origen: | Eslovaquia |
El cuvac eslovaco, cuyo nombre en eslovaco es slovenský čuvač, es imponente. Los machos miden entre 62 y 70 centímetros y las hembras, entre 59 y 65 centímetros. El peso se sitúa entre los 31 y los 44 kilos.
El pelaje de este perro es siempre blanco. Se tolera una ligera coloración amarilla en las orejas, pero no es deseable.
El cuvac eslovaco tiene un pelaje denso y brillante con abundante subpelo. Así pues, está perfectamente protegido en el clima riguroso de su patria montañosa contra el frío y el calor. La capa de pelo externa de entre diez y quince centímetros es ligeramente ondulada, pero no rizada ni con rayas. Los machos presentan una melena frondosa.
El cuvac eslovaco presenta una constitución casi rectangular con huesos fuertes.
Los párpados, los labios, la nariz y las almohadillas de este perro son oscuros. Los ojos son marrón oscuro y las orejas son de inserción alta y las lleva ceñidas a la cabeza. La cola, que tiene forma de puro, no debe estar enroscada ni posada sobre el lomo.
Debido a su aspecto, su origen y sus características típicas, el cuvac eslovaco podría confundirse fácilmente con otros perros pastores blancos de Europa del Este. Por ejemplo, el pastor de Tatra polaco y el kuvasz húngaro se parecen bastante.
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Antiguamente, el cuvac eslovaco se usaba en su patria como perro guardián y protector del ganado. Vigilaba las casas y granjas, así como los rebaños de ovejas y vacas. Incluso se enfrentaba a osos y lobos con valentía y seguridad en sí mismo.
Esta es justamente la razón por la que el cuvac eslovaco solo se cría con el pelaje blanco. De este modo, es más fácil de diferenciar en la oscuridad de los grandes depredadores, como osos y lobos.
¿Lo sabías? El nombre de la raza viene de la palabra eslovaca čúvať, que significa escuchar, vigilar o prestar atención.
Así pues, el cuvac eslovaco lleva el estado de alerta en su nombre. Sin embargo, al ser tan cariñoso y abierto, también está muy codiciado como perro familiar.
El tchuvatch eslovaco reacciona a los desconocidos y situaciones nuevas con reserva o incluso desconfianza. Solo tolera a otros perros en su territorio en casos excepcionales.
Para que este imponente pastor pueda convertirse en un perro de compañía familiar, debe estar bien socializado. Además, hay que enseñarle las cosas nuevas con cautela. Necesita una mano firme y un buen adiestramiento, lógicamente sin dureza. Por lo tanto, solo es apto para principiantes hasta cierto punto.
Un perro tan grande y trabajador como el cuvac eslovaco debe vivir en una casa con jardín donde pueda desplegar su instinto protector. Como es apegado y se lleva bien con los niños, disfruta en un entorno familiar.
Debe poder hacer suficiente ejercicio, pero no es necesariamente apto para los deportes caninos. En lugar de eso, puede asistir a una formación para perros de terapia, salvamento o rastreo. En Eslovaquia se dice que este perro puede aprenderlo todo.
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El pelo blanco y ligeramente ondulado del cuvac eslovaco es prácticamente autolimpiante y requiere pocos cuidados. Basta con cepillárselo periódicamente.
Solo deberás cuidarle el pelo más a fondo durante el periodo de muda. No obstante, debes saber que este perro pelecha mucho.
En cuanto a la alimentación, este perro tan modesto no presenta grandes exigencias. Es recomendable darle una alimentación natural con abundante carne de calidad y pocos cereales.
Además, asegúrate de adaptar la cantidad a su edad y nivel de actividad. En efecto, el cuvac eslovaco es buen asimilador de comida, por lo que no debe comer un alimento demasiado calórico. Basta con darle dos comidas al día cuando sea adulto. De lo contrario, podría adquirir sobrepeso fácilmente.
Para prevenir la peligrosa torsión gástrica, no le des de comer justo antes de salir a pasear.
El cuvac eslovaco es un perro robusto y resistente sin enfermedades hereditarias conocidas.
Como otras razas grandes, puede padecer problemas articulares como displasia de cadera y codo. Estas enfermedades se manifiestan con dolor y cojera.
La esperanza de vida media de este perro es de entre diez y doce años.
El cuvac eslovaco es una raza muy primigenia de las regiones montañosas de Eslovaquia. Sus raíces se remontan al siglo XVII. Según cuenta la leyenda, el imponente gigante blanco habría surgido del cruce entre un lebrel y un lobo.
La cría específica dio comienzo a principios del siglo XX. En aquella época, la raza estaba prácticamente extinguida.
El profesor Antonin Hruza de la Universidad Veterinaria de Brno fue quien creó el libro de cría. El cuvac eslovaco está reconocido oficialmente como raza desde enero de 1969. Está clasificado en el grupo 1, que engloba a los perros de pastor y perros boyeros (excepto perros boyeros suizos).
Fuera de su patria hay muy pocos criadores dedicados a la raza. Si quieres comprarte un cachorro, infórmate bien sobre qué criadores pertenecen a una asociación oficial y trabajan estrictamente según los estándares de raza prescritos.
Aléjate de las supuestas gangas que se encuentran en internet o en anuncios clasificados. A menudo, detrás de estos anuncios se esconden personas sin escrúpulos a las que no les importa la salud ni el bienestar de sus animales.
No es raro que practiquen la cría consanguínea o que los animales estén mal socializados. Por lo tanto, es muy frecuente que tengan problemas de salud y comportamiento.
Como el cuvac eslovaco no es una de las razas más extendidas, probablemente no lo encontrarás en una protectora.
Si quieres darle un nuevo hogar a un perro de la protectora de animales, pide asesoramiento en una. Puede que tengan perros con características similares que buscan familia.
Antiguo guardián del ganado, perro familiar cariñoso en la actualidad: el tchuvatch eslovaco tiene cada vez más adeptos. Su pelaje blanco puro y su estatura imponente lo convierten en un animal impresionante.
Sin embargo, su personalidad tranquila también sorprende. Si le ofreces un hogar en el campo y tareas que realizar, tendrás a tu lado a un amigo de por vida.
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