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Bondadoso, inteligente y siempre dispuesto a vivir aventuras: el barbet aúna muchos rasgos positivos que lo convierten en el perro de compañía ideal. Sin embargo, no hay que subestimar su necesidad de actividades variadas para estar tranquilo.
Según el estándar, el barbet es un perro mediano con una constitución compacta y una pelambrera impresionante. Los machos alcanzan una altura de cruz de 65 cm y las hembras, de 53-61 cm. Las orejas bajas y la cola las tiene caídas. Su largo pelaje, que a veces forma cordones, es rizado y se suele esquilar en verano. Presenta una barbita bajo la barbilla y bigotes sobre la nariz. De hecho, el nombre barbet proviene de la palabra francesa para barba: barbe. El pelaje puede ser negro, gris, leonado, marrón, arena o blanco. Aunque la mayoría son monocolores, también los hay con manchas.
Las raíces de este perro de agua francés llegan hasta África. Desde aquí, se cree que llegó a Francia con los árabes. Una vez allí, perros similares al barbet actual acompañaban a los granjeros en las costas francesas desde la Edad Media. Aquí, guardaban la casa y la granja, y acompañaban a la gente sencilla eficazmente en la caza. Otros perros de caza estaban reservados a la nobleza. Este perro de agua, como se llamó también a muchos perros similares desde el siglo XVI, cazaba principalmente patos y cisnes. Poco a poco se fue consolidando el nombre barbet para este tipo de perro en toda Europa. De hecho, durante un tiempo fue el término genérico para todos los perros de caza de agua con pelo ondulado.
Hacia finales del siglo XIX, los antepasados franceses del actual barbet estaban casi extinguidos. Solo unos pocos granjeros o cazadores furtivos conservaban a este peludo. Sin embargo, a partir de la década de 1970 experimentó un nuevo auge gracias a su simpatía. Esto hizo que hoy en día haya una población estable. Actualmente se tiene al barbet como perro de caza de aves acuáticas y también como perro de compañía. Aunque no es un perro muy común, ha influido en gran medida en el mundo canino. De hecho, participó en el nacimiento de perros de caza como el perro de agua irlandés o el pudelpointer. También se sospecha que el pastor de Brie proviene de un cruce entre el barbet y el picardo. Lo que no se ha demostrado es que el caniche venga del barbet.
Si está bien desfogado, el barbet es un peludo agradable y polifacético. Este es un perro muy simpático, tranquilo y sociable que se integra a la perfección en una familia activa. Siempre está dispuesto a vivir aventuras, pero no pierde la calma fácilmente. Es fiel a sus personas de referencia, aunque ante los desconocidos se muestra más bien distante. Si bien ladra cuando percibe algo inusual, nunca lo hace con estridencia.
Este perro es curioso y le gusta aprender, por lo que su adiestramiento resulta bastante fácil. Sin embargo, al ser tan sensible e inteligente, detecta enseguida cualquier incoherencia, por pequeña que sea. Así pues, mantente firme, aunque te intente engatusar con la mirada de cordero. Un no siempre debe significar no. El refuerzo positivo y un adiestramiento variado son las claves del éxito con este perro tan sensible. Llévalo a una escuela para cachorros para que conozca perros de distintos tamaños y caracteres. Además, aquí hará amiguitos para toda la vida. La asistencia a una escuela canina no solo es ideal para enseñar a los principiantes las bases de la obediencia en el adiestramiento. De hecho, también permite a los expertos refrescar conocimientos y reforzar la socialización de su peludo.
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La creciente demanda de los últimos años ha hecho que cada vez más criadores poco serios ofrezcan barbets. Piensa que elegir un criador responsable es la mejor base para que tu perro viva una vida larga y sana. Los criadores deben trabajar únicamente con animales sometidos a pruebas de displasia de cadera y codo. Por eso, debes pedirle que te muestre los resultados por escrito. Lógicamente, un peso saludable y un ejercicio adecuado también contribuyen a la buena salud de las articulaciones.
En algunas líneas, el barbet presenta una predisposición genética a la epilepsia y al entropión (malformación del párpado). Los criadores serios rastrean los árboles genealógicos varias generaciones atrás y eligen a los animales según el tipo, el carácter y la salud de los antepasados. Como les pasa a muchos perros de agua, el peligro de infección de oído en el barbet es bastante alta. Sin embargo, este riesgo se puede contrarrestar con una atención y cuidados apropiados. Un barbet en buena forma es muy resistente y robusto, ya sea en la fría agua o en el campo. Sin embargo, no soporta el calor y, por eso, es mejor esquilarlo en verano. La esperanza de vida media de esta raza se sitúa entre los trece y los quince años.
Ofrécele a tu barbet una alimentación acorde a la especie que contenga mucha carne. Independientemente de si eliges pienso o comida húmeda, la carne debe ser el ingrediente principal de la lista. Lo mejor es que sigas dándole al cachorro la comida que comía con el criador, aunque luego se la cambies. Cuando ya se haya adaptado al nuevo hogar, poco a poco puedes ir mezclando cada vez más de la nueva con la antigua. Así, evitarás que tenga reacciones de hipersensibilidad. Este método ha demostrado su eficacia también con perros adultos.
Para las golosinas, opta por recompensas saludables, como snacks de carne deshidratada o snacks dentales para perros. En cuanto al alimento principal, elige uno de calidad que no contenga cereales ni azúcar. De vez en cuando, dale huesos para masticar o artículos secos, como panza, para que disfrute masticando. Con un perro mediano como el barbet, es importante dejarlo descansar después de las comidas para prevenir una torsión gástrica. Por eso, es mejor darle de comer después de las excursiones y antes de una apacible siesta. Contrólale el peso y, si no estás seguro/a, pésalo cada equis semanas para poder combatir el sobrepeso a tiempo. Esto suele ser posible sin necesidad de recurrir a comida de dieta. En lugar de ello, dale raciones adaptadas a sus necesidades y procura que haga más ejercicio. Recuerda que tu perro siempre debe tener agua fresca a su disposición.
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El pelaje ondulado del barbet lo lleva con un look natural y es fácil de cuidar. Sin embargo, cuando lo tiene más largo, se debe cepillar a fondo semanalmente para prevenir enredos. Examínale el pelaje a diario para detectar hojitas o ramitas, que se enganchan fácilmente. Al hacerlo, aprovecha para inspeccionarle las orejas, ya que es propenso a las otitis. Puedes prevenirlas manteniéndole los oídos sin pelos y limpiando la suciedad con un producto especial para perros. Al primer signo de otitis, acude al veterinario.
Si el pelaje del barbet está muy sucio, puedes bañarlo con un champú suave para perros. Aunque le guste la humedad por ser un perro de agua, deberás practicar este ritual desde cachorro. Mucha gente esquila a su peludo en verano, ya que es un auténtico alivio en días calurosos. Tampoco pasa nada por esquilarlo más a menudo, hasta cuatro veces al año. Pide asesoramiento al respecto al criador. Además, con un poco de práctica podrás hacerlo tú mismo/a en casa. Córtale las uñas cuando estén demasiado largas para que no se quede enganchado con ellas y se haga daño.
Básicamente, el barbet sigue siendo apto para la caza. Por ejemplo, puede recuperar presas del agua o mostrar sus talentos como perro de muestra o rastreo. Sin embargo, también puede tenerse perfectamente como perro de compañía, siempre que le ofrezcas otro entretenimiento. Este peludo tan polifacético puede realizar cualquier trabajo de olfateo, como juegos de búsqueda o mantrailing. Además, puede practicar deportes caninos como el agility y acompañarte en excursiones largas o cuando salgas a correr. Recuerda que debes adaptar la actividad deportiva al estado físico de tu perro. Los perros jóvenes, en particular, deben realizar un ejercicio moderado. Asimismo, este peludo tan sensible no solo es apto para la caza y el deporte. De hecho, también puede demostrar su valía como perro guía o de terapia.
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Este inteligente perro debe vivir en un hogar activo con personas con las que pueda hacer muchas cosas. Lo que está claro es que no es un perro para gente casera. Así pues, deberás invertir varias horas al día para hacer cosas con tu perro de agua francés. Esta raza es ideal para familias y puede llevarse estupendamente con los niños. La condición es que estos hayan aprendido a tratar a los animales con respeto. También puede hacerse amigo de los gatos, pero, para ello, debe haber conocido varios de cachorro.
Pese al tupido manto de pelo, apenas encontrarás pelos en casa. En efecto, el barbet no pelecha o solo lo hace ligeramente su subpelo. Puedes eliminar estos pelos cepillándolo periódicamente, de modo que no acaben en tu casa. Sin embargo, esto no significa que sea un perro para alérgicos. Comprueba en el médico si existe la posibilidad de que seas alérgico a los perros antes de adoptarlo. En caso de duda, habla con él sobre tus opciones. Dado que algunos alérgicos no reaccionan al barbet, es recomendable pasar mucho tiempo con uno de antemano.
Los principiantes pueden tener un barbet sin problemas, siempre que acudan con él a una escuela canina. Aunque, ya solo por su tamaño, no es apto para vivir en un piso pequeño, con suficiente espacio puede vivir en la ciudad. En ese caso, llévalo a parques o a hacer excursiones fuera de la ciudad a menudo para que disfrute de la naturaleza. En general, este perro tan apegado y sociable no debe quedarse mucho tiempo solo. Consejo: antes de la llegada del cachorro, planifica quién se quedará con él durante las vacaciones. ¿O quizá te gustaría llevártelo contigo? Gracias a los numerosos hoteles que admiten animales bien educados, no hay nada que impida que te lo lleves a unas vacaciones de senderismo en zonas con clima moderado.
La popularidad del barbet está aumentando ligeramente incluso fuera de Francia en los últimos años. Sin embargo, sigue siendo una raza relativamente rara. Por ejemplo, en España ni siquiera existen registros en la Real Sociedad Canina. No obstante, no dejes que esto te empuje a comprar un supuesto barbet sin documentación. Confía en los conocimientos de los criadores serios que contribuyen a la conservación de esta raza con su trabajo. Para ellos, lo más importante es crear cachorros sanos, con un carácter consolidado y conformes al estándar.
Cuando visites al criador en su casa, hazte una idea de los padres y asegúrate de que la crianza de los cachorros sea cariñosa. Si el criador también te hace preguntas a ti, esto es buena señal. Al fin y al cabo, demuestra que se preocupa por el futuro de sus peludos. Aunque puede que tengas que esperar mucho o recorrer largas distancias para conseguir un barbet en las mejores circunstancias, esto beneficiará a tu futuro amigo.
¿Prefieres adoptar un perro adulto? En ese caso, necesitarás un golpe de suerte para encontrar un barbet sin hogar. Después de todo, la raza sigue siendo relativamente poco frecuente fuera de Francia. Lo mejor es que acudas a asociaciones especializadas. Si no hay ninguna en tu país, puedes preguntar en asociaciones de perros de agua. Es posible que encuentres uno en algún club de perros de muestra franceses. También podría interesarte otra raza de perros de agua o un mestizo con características similares. En la protectora de tu ciudad puede que encuentres un peludo con cualidades estupendas que te engatuse con sus encantos. Abre tu mente cuando busques un perro adulto e infórmate ampliamente sobre sus antecedentes para averiguar si encaja contigo y tu situación vital.
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