{"url":"https://www.zooplus.es/magazine/perros/alimentacion-del-perro/dieta-barf-para-cachorros","title":"Dieta barf para cachorros: ¿sí o no?","mag_id":245059,"is_single":true,"cat_name":"Perros","sub_cat_id":232,"sub_cat_name":"Cachorros","cat_id":225}
Una ración de barf equilibrada requiere más que un solo trozo de carne.
El barf está ganando adeptos en los últimos años. Sin embargo, este método de alimentación tiene sus particularidades, especialmente con los cachorros. En este artículo te ayudamos a entender la dieta barf para cachorros.
Alimentar a un cachorro con la dieta barf es posible y tiene sentido. De hecho, con este método puedes satisfacer las necesidades particulares de tu cachorro. Además, puedes usar los ingredientes que tú quieras. Así, tú decides de dónde provienen los componentes y cómo se elaboran.
¿Es buena para los cachorros?
Los cachorros también pueden crecer de manera sana y cubrir sus necesidades con la dieta barf. Sin embargo, es importante tomar nota de ciertas cosas y alimentarlos con raciones equilibradas con todos los minerales, vitaminas y oligoelementos que necesitan.
¿Qué hay que tener en cuenta?
Un perro adulto ya tiene exigencias particulares a la hora de cubrir su demanda de nutrientes esenciales. Un cachorro, que crece tan rápido en tan poco tiempo, tiene una demanda aún mayor de estos nutrientes.
El aporte de energía no debe ser excesivo para que el crecimiento no sea demasiado rápido. No obstante, el suministro de calorías ha de ser suficiente. La ración debe contener una cantidad de calcio y fósforo que cubra sus necesidades en la proporción correcta.
Para hallar las cantidades correctas, necesitarás muchos conocimientos de alimentación. Por eso, deberás investigar mucho en el tema de la comida para perros. Si no tienes tiempo o quieres estar totalmente seguro/a de estar alimentando bien al cachorro, pide ayuda a un profesional.
¿Cómo se reconoce a un buen profesional?
Asesoramiento sobre la dieta barf para cachorros
Los veterinarios han realizado estudios exhaustivos sobre todo lo relacionado con los perros. Además, hay veterinarios especializados en alimentación. Gracias a su formación adicional, ofrecen asesoramiento de calidad y son una buena referencia.
Pregunta a tu veterinario por estos profesionales, ya que seguro que podrá recomendarte a alguno.
¿A partir de cuándo se puede empezar?
La dieta barf para cachorros nacidos en casa puede empezar a implementarse desde la quinta semana. Debe darse como complemento a la leche materna y ser fácil de digerir. Además de la carne, dale verduras y huesos crudos picados para garantizar el aporte de calcio.
Alrededor de la séptima semana empieza el destete de la madre. Ahora ya puedes alimentarlo exclusivamente con una dieta barf para cachorros.
También puede morder huesos con carne crudos para favorecer el cuidado de los dientes de leche. Puedes reducir el riesgo de que se haga daño en los dientes de leche dándole huesos blandos con mucho músculo. Por ejemplo, los cuellos de pollo, las costillas de cordero y el rabo de buey son buenas opciones.
¿Cómo empiezo?
Lo más fácil, lógicamente, sería que el cachorro ya hubiera empezado con la dieta barf en casa del criador. Así, lo único que tendrías que hacer es seguir con su comida habitual.
En caso contrario, es mejor que vayas sobre seguro y le des su comida habitual las dos primeras semanas. La llegada a un nuevo hogar ya es suficientemente excitante para el pequeñajo. A continuación, el cambio de comida debe ser paulatino y cuidadoso.
Cambio a la dieta barf
Para cambiar de un pienso comercial a la alimentación barf para cachorros, primero sigue dándole principalmente su comida habitual. Después, ve sustituyendo partes de la ración por carne cruda y verduras. Es importante que la transición sea gradual para que el aparato gastrointestinal pueda acostumbrarse al nuevo alimento.
Al principio, algunos cachorros se muestran escépticos con la comida que desconocen. Para que le resulte más fácil, puedes cocer la carne un poco e ir acortando el tiempo de cocción paulatinamente. Además, si le ofreces un trozo de carne con la mano a modo de snack, le vendrán ganas de más.
¿Cuántas raciones de barf debe comer un cachorro?
Independientemente de si es comida convencional o barf, los cachorros comen tres o cuatro veces al día. En cuanto a la cantidad, necesitan entre el cuatro y el seis por ciento de su peso corporal al día.
En razas muy pequeñas o grandes, el porcentaje debe ajustarse al alza (muy pequeñas) o a la baja (muy grandes). Además, hay que tener en cuenta las necesidades de cada perro y calcular el aporte calórico en consecuencia.
¿Cómo hago el barf correctamente?
Una ración normal es un ochenta por ciento de origen animal y un veinte por ciento de origen vegetal. Si se añaden cereales, hay que ajustar estas proporciones. Un perro sin problemas de salud suele tolerar muy bien cereales procesados y otros hidratos de carbono.
Para que una dieta barf para cachorros sea equilibrada e incluya todos los nutrientes, necesarios, debe contener lo siguiente:
Carne y productos animales
La carne y otros productos animales aportan energía y son una fuente de proteínas y aminoácidos. Tu cachorro necesita todo esto para crecer como es debido.
Fruta y verdura
La fruta y la verdura son fuentes de fibras importantes para el intestino. Puedes utilizarlas frescas o en forma de copos deshidratados. Solo se deben utilizar alimentos aptos para perros.
Cereales y Cía.
Los hidratos de carbono no figuran necesariamente en una ración de barf clásica para perros. Sin embargo, aportan energía inmediata a casi todos los procesos metabólicos del cuerpo.
Puedes utilizar distintos cereales procesados, patatas o arroz. Para que el perro las asimile bien, las fuentes de carbohidratos deben estar cocinadas.
Aceites
Los aceites contienen ácidos grasos importantes. Como el contenido de ácidos grasos omega 3 y 6, y vitamina D de los aceites varía, debes añadir una mezcla de distintos aceites.
Aditivos
En una dieta barf para cachorros estricta no se utilizan aditivos artificiales. De hecho, las raciones contienen ingredientes naturales que aportan todos los minerales, oligoelementos y vitaminas.
Sin embargo, los aditivos adaptados a las necesidades del cachorro y su ración son más fáciles de dosificar.
Ayuda de las tiendas especializadas
Si no quieres complicarte la vida, puedes recurrir a los menús barf completos de las tiendas especializadas. Estos están compuestos por carne fresca y una proporción perfectamente ajustada de fruta y verdura. No obstante, estos menús tampoco son perfectos.
En efecto, no todos contienen todos los nutrientes necesarios. Por tanto, asegúrate de que el menú sea apto para cachorros y que incluya todos los nutrientes esenciales en la lista de componentes.
Si quieres asegurarte, pídele a un nutricionista canino que examine el menú.
Soluciones intermedias y alternativas
La alimentación barf para cachorros también tiene sus riesgos. De hecho, la carne cruda entraña un peligro de infección nada despreciable debido a los gérmenes. Este peligro no solo amenaza al perro, sino también a su cuidador, ya sea directa o indirectamente. Los niños pequeños y las personas inmunodeprimidas son las que corren más peligro.
Comida cocinada en casa
Una solución intermedia es la alimentación con comida cocinada en casa. La pérdida de nutrientes de la carne es muy baja y la transmisión de gérmenes queda descartada. Las raciones cocinadas tienen la misma composición que las de la dieta barf para cachorros.
Barf parcial
Otra opción es combinar una dieta barf ocasional o parcial con la alimentación convencional. Eso sí, asegúrate de que el cachorro no reciba un aporte excesivo o insuficiente de nutrientes esenciales.
Con cualquier tipo de alimentación, lo más importante es que el cachorro la digiera bien y crezca sano. Si es así, lo estás haciendo bien.
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