Comida casera para perros: cosas a tener en cuenta
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Antes de ponerse a cocinar la comida del perro hay que informarse bien y, si cabe, acudir a un experto.
¿Comida casera para perros como alternativa a los piensos comerciales? Cada vez más gente decide prepararle la comida a su perro personalmente. Te explicamos qué tener en cuenta y cuáles son los pros y los contras de la comida casera para perros.
Índice
Comida casera: ¿una alternativa saludable?
Cuando alguien dice que cocina para su perro quiere decir que el perro come los ingredientes que su cuidador/a elige una vez cocinados. Si se trata de una dieta rica en carne, vegetariana o vegana es algo imperceptible a primera vista.
Como cualquier otro método de alimentación, la comida casera para perros per se no es mejor ni peor. Un factor importante es si la alimentación contiene todos los nutrientes esenciales en las cantidades correctas.
También hay que abordar las necesidades individuales. Al fin y al cabo, no a todos los perros les sientan bien todos los tipos de alimentación.
¿Para qué perros es adecuada?
Lo bueno de cocinar la comida en casa es que se puede adaptar la composición a las necesidades del perro. Básicamente, este método es apto para todos los perros y etapas de vida, aunque con unas pocas excepciones.
Los perros mayores necesitan una dieta adaptada que hay que tener en cuenta si quieres preparársela en casa. Del mismo modo, ciertas enfermedades requieren ajustes en el aporte de nutrientes.
¿Quién se beneficia de la comida casera?
Los perros con requisitos especiales, como intolerancia a ciertos ingredientes, tienen una gran ventaja con esta comida. Además, una dieta elaborada por profesionales también puede ayudar con otras enfermedades o una combinación de varias dolencias.
Cuidado con los cachorros
Sin embargo, la comida casera para perros no está indicada para todos los peludos. Los cachorros consumen gran cantidad de ciertos nutrientes en algunas fases muy extremas de crecimiento. Este consumo varía de una fase a otra.
Este requisito se debe abordar individualmente para que no se produzcan trastornos graves del crecimiento.
Comida casera para perros: preparación
A la hora de cocinar comida casera para tu perro, puedes orientarte por los ingredientes del barf. Casi todos los componentes de una ración de barf se pueden servir también cocinados o al vapor.
Para freír los ingredientes se suele utilizar demasiada grasa, por lo que es mejor que no los cocines así.
Ingredientes que solo deben servirse crudos
Hay algunos ingredientes que son una excepción. Los huesos devienen quebradizos al cocinarlos y podrían hacerle heridas al perro en el aparato digestivo.
Los aceites y aditivos también deben añadirse después de la cocción para no destruir los componentes importantes. Al calentarlas, las vísceras despiden un olor fuerte que no gusta a todo el mundo.
¿Hay alguna regla de oro para las cantidades de los ingredientes?
La proporción exacta de ingredientes no se puede determinar categóricamente. Una ración rica en carne similar al barf se compone de un ochenta por ciento de carne y un veinte de verduras. En una ración vegetariana o vegana hay que cambiar las proporciones de proteína y fibra.
Además, la decisión de incluir o no carbohidratos y el nivel de actividad del perro son factores que también influyen. Por eso, siempre hay que calcular las proporciones en función del método de alimentación.
Comida casera para perros: ingredientes
Como con cualquier dieta, lo primordial es una proporción equilibrada entre los componentes, como proteínas, grasas y fibras. Para conseguirla, puedes utilizar varias fuentes de proteínas y fibras, así como aceites.
Carne y otras proteínas animales
Las proteínas de origen animal, como la carne de varios animales, los huevos y el requesón, se utilizan en el organismo canino para obtener energía y aminoácidos. Las proteínas animales cuentan con una composición de aminoácidos óptima para los perros.
Proteínas vegetales
Si eliges alimentar a tu perro con una dieta vegana, deberás sustituir las proteínas animales por productos vegetales. Estos deben presentar una composición de aminoácidos similar a la de las fuentes animales.
Uno de estos productos vegetales ricos en proteínas es la soja.
Fruta y verdura
La fruta y la verdura aportan fibras importantes para el intestino. Puedes utilizarlas tanto frescas como deshidratadas. Recuerda emplear solo alimentos aptos para perros.
El calabacín, la zanahoria, la remolacha, la manzana y la pera son solo algunos alimentos vegetales aptos para la comida casera para perros.
Cereales y otras fuentes de carbohidratos
Aceites
Como el contenido de ácidos grasos omega 3 y 6, y vitamina D de los aceites varía, es recomendable añadir una mezcla de distintos aceites.
Por ejemplo, los aceites de pescado, lino y pipas de girasol aportan muchos ácidos grasos importantes.
Complementos
Los complementos minerales y vitamínicos aportan nutrientes importantes que no están presentes de forma suficiente en los alimentos.
El complemento adecuado en cada caso depende de la forma de alimentación y de los ingredientes de las comidas diarias.
Comida casera para perros: pros y contras
La posibilidad de tener en cuenta las necesidades y posibles intolerancias de cada perro cocinando en casa ofrece una gran ventaja frente a la mayoría de alimentos comerciales. Además, este método permite abordar otros aspectos de calidad de los ingredientes.
La calidad bío, el cultivo local o el bienestar de los animales de granja son solo algunos de estos criterios.
Inversión de tiempo y dinero
La calidad puede verse reflejada en el precio de los ingredientes. Con un perro grande, la compra semanal puede resultar bastante cara. Aparte de los costes, la gran inversión de tiempo que requiere preparar las raciones constituye un inconveniente del que hay que ser consciente.
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Errores que hay que evitar
Con la comida casera para perros se cometen errores típicos que se pueden evitar fácilmente. Debe haber una cantidad suficiente de nutrientes, pero la proporción también debe ser equilibrada.
Además, algunos ingredientes, como los frutos de cáscara o la carne de cerdo, deben cocinarse muy bien. En cambio, los huesos, aceites y complementos se añaden después de que se haya enfriado la comida.
Importante: La comida del perro nunca debe contener especias.
Cambio de alimentación paulatino
Los cambios de alimentación del perro deben realizarse gradualmente para dar tiempo a la flora intestinal a adaptarse. Empieza con hasta un cuarto del nuevo alimento y ve aumentando la cantidad paulatinamente durante dos semanas o más.
De esta manera, incluso los perros más tiquismiquis aceptarán mejor la nueva receta.
Errores comunes en las dietas blandas
Un error común que acaba provocando déficits importantes a la larga es la administración permanente de una dieta blanda. A los pacientes con diarrea suele dárseles pollo con arroz para descargar el intestino. A corto plazo, esta dieta es una buena manera de favorecer la salud intestinal.
No obstante, si se mantiene durante meses, se necesitan complementos para prevenir déficits.
Lógicamente, con cualquier otra combinación de ingredientes debe prestarse atención a complementar los minerales o vitaminas que falten.
Alimentos prohibidos
Tanto con la comida casera para perros como con cualquier otro método, hay alimentos totalmente prohibidos para los perros. Estos incluyen, entre otros, el chocolate, las uvas, las nueces y las nueces pacanas.
Conclusión
La comida casera para perros es una buena alternativa a los productos comerciales, siempre que la composición sea equilibrada. Antes de cambiar a este método, ten en cuenta la inversión de tiempo y, según la calidad de los ingredientes, el aumento de costes.
Si prestas atención a los posibles problemas y pides ayuda a un asesor, seguro que todo irá de maravilla.
¿Cómo se reconoce a un buen asesor nutricional canino?
Cuando elijas a un asesor nutricional, fíjate en que tenga una formación seria y consolidada de una institución reputada. Es muy recomendable hablar con veterinarios especializados y expertos nutricionales, tanto si tu perro está enfermo como si está sano.
Una formación de varios días no basta para disponer de conocimientos amplios sobre alimentación canina. A menudo, esto conduce a dietas que pueden provocar déficits importantes de vitaminas y minerales esenciales.
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