Los zapatos, el cable, el teléfono, los rotuladores, el sofá, las alfombras o el cubo de basura… Nada está a salvo del vandalismo de algunos canes. Los, a veces, salvajes peludos pueden poner la casa patas arriba en cuestión de minutos. Pero ¿por qué mi perro destroza todo? ¿qué puedo hacer para cambiar ese comportamiento?
El susto es grande cuando llegas a casa y tu sala de estar parece haberse convertido en un campo de batalla. Una vez te hayas calmado y ordenando un poco, seguro que te preguntas si se trata de un hecho aislado y cómo actuar en caso de que se repita. Lo que está claro es que después de una experiencia así no te volverás a ir tan tranquilo de casa. Como muy tarde, cuando tu peludo empiece a romper objetos valiosos o cuando tengas que llevarle al veterinario porque se ha tragado alguna cosa, sabrás que ha llegado la hora de actuar. Pero ¿qué puedes hacer para controlar un comportamiento tan destructivo?
Mantén la calma
Imagínate que llegas a casa después de un agotador día de largas reuniones, abres la puerta y ves que el papel higiénico está esparcido por todo el pasillo, tu sillón favorito está destrozado y el contenido del cubo de basura está repartido sobre la alfombra más cara. Está claro que para la mayoría de las personas es muy difícil mantener la calma en este tipo de situaciones. Pero tú mismo te darás cuenta de que gritarle a tu perro o estallar un plato contra el suelo no es una solución, es más, empeora la situación.
Aunque sea difícil e incluso puede que esto te parezca estúpido, cierra los ojos, cuenta hasta diez a la vez que respiras en profundidad y con calma. Te darás cuenta de que este ejercicio te tranquiliza y tendrás más control sobre tu ira. Antes de ponerte a recoger la basura, limpiar la alfombra y enrollar de nuevo el papel higiénico, coge a tu peludo y llévatelo a dar un paseo o a correr. Esto no solo te relaja a ti, sino también a tu can, que después de los destrozos causados también estará bastante alterado. Al aire libre puedes retomar fuerzas para enfrentarte al caos que te espera en casa y pensar con calma cuál es el siguiente paso para mejorar la situación.
¿Cómo proteger mis cosas de mi perro?
Durante los próximos días puedes intentar proteger tus cosas de tu perro al guardar o embadurnar todos los objetos peligrosos o de valor con algún líquido de olor desagradable (para que a tu amigo canino se le quiten las ganas de morderlos). Pero estas medidas solo funcionan a corto plazo. Los castigos que se proponen en algunos foros de internet solo empeoran las cosas, en lugar de ayudar a largo plazo. Olvídate de comprar aparatos que rocían agua sobre tu perro mediante un mando a distancia cada vez que se acerca a un determinado objeto o de ruidosas latas que se caen al suelo, asustándolo en cuanto empieza a morder un determinado mueble.
No obstante, si tu perro destroza todo, es mejor que, la próxima vez que salgas de casa, mantengas fuera del alcance de tu peludo todos los objetos valiosos o que se rompen con facilidad. Coloca los zapatos en el armario y esconde el cable del teléfono detrás de los muebles. Al menos, de esta forma, puedes reducir los daños que tu cuadrúpedo puede ocasionar mientras tú no estás.
Encuentra la causa del comportamiento de tu perro
El problema de los consejos explicados más arriba es que solo sirven para ir contra los síntomas, pero no analizan las causas del comportamiento de tu perro. Una solución duradera para controlar el vandalismo de tu peludo solo es posible si se comienza a buscar qué es lo que lo ocasiona. Lo que está claro es que ningún perro destroza porque le divierte que te cabrees. Es más probable que detrás de esta conducta inapropiada de tu can haya algún problema psíquico o físico que lo atormenta.
¿En qué momento mi perro destroza todo?
Uno de los primeros pasos para llegar a descubrir la causa es saber cuándo le dan los ataques de vandalismo a tu perro. Además ¿se dedica a destrozarlo todo solo cuando tú no estás? ¿comienza con los destrozos en cuanto sales por la puerta o pasa un buen rato desde que te has ido? Para averiguar esto puedes poner una cámara y grabar a tu perro cuando te encuentres ausente.
Aburrimiento y falta de ejercicio
Si tu perro destroza todo un buen rato después de que tú te hayas ido, es posible que sea por aburrimiento. De hecho, este es uno de los desencadenantes más comunes del comportamiento destructor en los perros. Los canes que no reciben suficientes estímulos físicos o mentales tienden a buscarse sus propias actividades. Al mordisquear los cables, revolver en la basura o romper los cojines intentan calmar su curiosidad reprimida y descargar el exceso de energía.
Entretenimiento físico y mental
Ya sea un perro guardián grande o un pequeño perrito, todo can necesita moverse y estimular la mente. Claro que esta necesidad de estar ocupados depende de la raza, la edad y el sexo, pero ningún cuadrúpedo está hecho para pasarse el día echado en casa, esperando a que vuelvas. Si te has dado cuenta de que tu peludo destroza los objetos por aburrimiento es importante que tenga más entretenimiento y haga más ejercicio físico a lo largo del día. Un breve paseo alrededor de la manzana no es suficiente para satisfacer a tu aburrido can. Haz excursiones por la naturaleza con tu peludo o llévatelo a correr o deja que corra a tu lado mientras tú vas en bici, llévalo a nadar al lago o al mar… Tu eres quién mejor conoce a tu fiel amigo canino y sabes qué tipo de ejercicio le divierte más.
Deporte para perros que están aburridos
Además de ejercicio físico, los perros también necesitan desafíos mentales. Los juguetes de inteligencia, los juegos de búsqueda, los lanzamientos de pelota o de palos y aprender pequeños trucos son posibilidades fantásticas para estimular la mente de tu can y encauzar su energía. Además, se recomienda acudir a una escuela para perros.
Apunta a tu peludo a un deporte para perros adecuado para que podáis ir juntos con frecuencia. Ya sea agility, obedience, dog dancing o mantrailing, la oferta es tan amplia que seguro encuentras el más apropiado para tu cuadrúpedo y tú. Incluso algunos perros, que en un principio se criaban para ser perros de trabajo, pueden educarse para ser perros de servicio o de salvamento.
Mi perro destroza todo ¿qué más puedo hacer?
Los perros que gastan su energía física y mental suelen estar más tranquilos y equilibrados en casa. Incluso los pequeños torbellinos disfrutan de una siesta en la cama después de haber realizado un gran esfuerzo. Antes de salir de casa para ir a una reunión extensa, haz algo con tu peludo, como dar un largo paseo y jugar con él a atrapar una pelota, para que esté cansado y disfrute de la tranquilidad y el silencio de la casa. Si te vas durante un tiempo más largo y tienes miedo de que tu perro se aburra, déjale algo con lo que entretenerse, para que no le entren ganas de mordisquear tus muebles. Una caja con juguetes para perros, una manta vieja o un juguete rellenable que despierte el interés de tu can y lo distraigan del vandalismo.
Estrés y miedo al abandono
Aparte de la escasez de ejercicio y el aburrimiento, otras posibles causas del por qué tu perro destroza todo puede ser el estrés y el miedo. Si cuando pones la cámara para vigilar a tu can, te das cuenta de que comienza a desfogarse con los muebles nada más cerrar la puerta, es posible que se deba al estrés y a la ansiedad por la separación. A menudo, a este miedo a quedarse solo le precede inquietud. Los perros que padecen de este tipo de trastornos de ansiedad ladran, aúllan, corren nerviosos de un lugar a otro o incluso se orinan en cuanto se dan cuenta de que su humano quiere salir de casa sin ellos.
Ayuda profesional
A diferencia de los destrozos por aburrimiento, no es posible solucionar los que se dan por la ansiedad a la separación sin ayuda profesional. Si temes que los desencadenantes del vandalismo de tu peludo sean el miedo y el estrés, debes ponerte en contacto con tu veterinario, un entrenador de perros o directamente con un psicólogo de animales. Gracias a sus conocimientos y experiencia pueden catalogar el comportamiento de tu can y recomendarte un entrenamiento profesional adecuado para ti y tu peludo. Es bastante probable que tu fiel amigo canino necesite algo de tiempo para superar su ansiedad y puedas volver a dejarlo solo en casa por un breve momento sin preocuparte. Ten paciencia y no le abrumes demasiado pronto. Los expertos te darán consejos para tener éxito en este extenso periodo de terapia.
Otras causas de los destrozos
A veces, el vandalismo de los perros solo es una fase que desaparece sola. Cuando los perros jóvenes están pasando por el cambio de dientes, que suele ser entre el tercer y el séptimo mes, tienden a morder todo lo que encuentran. Al igual que los niños pequeños, que se meten todo en la boca, algunos cachorros descubren su mundo de esta manera. Las patas de las sillas, los cojines, las alfombras… Nada está a salvo de sus pequeñas bocas. A pesar de que esta fase oral suele desaparecer una vez maduran, es importante poner límites a los cachorros cuanto antes. Sé consecuente y cariñoso, es la mejor manera de que los perritos aprendan qué cosas están prohibidas y qué esperas de ellos.
Poner a prueba los límites durante la pubertad
Una educación amorosa y consecuente también es necesaria cuando tu perro muestra un comportamiento destructivo en la etapa juvenil. Según la raza, los perros alcanzan la madurez sexual entre los 6 meses y el año de vida. Durante esta etapa hormonal en la que crean nuevas neuronas, los peludos están un poco fuera de sí. Mientras que algunos cuadrúpedos se vuelven tozudos, ignorando los comandos, otros ponen a prueba los límites. Para ver hasta dónde pueden llegar sin que su humano se enfade, comienzan a mordisquear el sofá, los zapatos o incluso el armario.
Sé consecuente
Lo importante es que siempre seas consecuente y le demuestres a tu perro que no toleras este tipo de comportamientos salvajes. Mantén los comandos y recompensa a tu peludo con una golosina, por ejemplo, cuando haya conseguido comportarse. Así aprenderá que su rebelión y sus actos destructivos no le llevan a nada, sino que es mejor hacerte caso y obedecerte, pues le trae beneficios. Si tu can es persistente y no se deja influenciar por el refuerzo positivo, no tengas miedo de acudir a tiempo a un experto en conductas caninas. Los trastornos de ansiedad y las tendencias agresivas suelen comenzar en la pubertad. Cuanto antes las reconozcas, mayores son las posibilidades de que tu cuadrúpedo tenga un desarrollo psíquico sano.
Si no encuentras la causa
En efecto existen perros que lo muerden todo sin que ninguna de las causas nombradas procedan. Aunque esto es bastante raro, algunos perros tienen hambre cuando mordisquean la manta, los zapatos o los cojines. Nada está a salvo de los perros que están a dieta estricta: en su hambruna buscan comida en los armarios de la cocina y en los cubos de basura, y calman su ansia de morder con cualquier objeto que encuentren en la casa. Al fin y al cabo, una dieta en la que se pasa hambre no es buena para bajar de peso, para los humanos ni para los animales. Los perros con sobrepeso necesitan un alimento bajo en calorías, pero que contenga todos los nutrientes importantes que necesita un peludo para su salud.
Sé sincero
Plantéate primero ¿por qué mi perro destroza todo? Sea cual sea la causa del comportamiento destructivo, sé siempre sincero contigo mismo durante la investigación de los desencadenantes y las consecuentes soluciones. La mayoría de los que tienen perro quieren lo mejor para ellos, pero nadie es perfecto. Todos cometemos errores, ya sea por falta de tiempo, desconocimiento o sobrecarga. Lo decisivo es reconocerlos y estar dispuesto a hacer algo al respecto. ¡Nunca es demasiado tarde para hacer entrar en razón al perro y al humano!
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