El Hyphessobrycon amandae presume de un color rojo chillón.
El tetra ámbar (Hyphessobrycon amandae) mide como máximo tres centímetros de longitud. No es muy grande, es verdad, pero derrocha belleza con su precioso color. En este artículo te explicamos cosas interesantes sobre su aspecto, su tenencia y su reproducción.
El Hyphessobrycon amandae se conoce en español como tetra ámbar y en inglés, como ember tetra.
Es un pez de agua dulce que pertenece a la familia de los carácidos (Characidae). De hecho, con su longitud de entre 1,7 y tres centímetros, es uno de los más pequeños.
¿Qué aspecto tiene?
Este pececito presenta tonalidades de rojo chillón. A través de sus escamas translúcidas, pero de un color vivo con acentos amarillos, naranjas o rojos, pueden verse los órganos internos y la columna vertebral. El color se intensifica aún más en aguas blandas, ácidas y sin turba.
El pez tiene la boca terminal y el cuerpo largo y esbelto. En el lateral suele presentar una franja rojiza.
Diferencia entre sexos: ¿hembra o macho?
Algunos animales presentan un dimorfismo sexual claro, es decir, las hembras y los machos se diferencian por características externas.
Este no es el caso del Hyphessobrycon amandae, en el que es muy difícil distinguir los sexos a simple vista. Se dice que las hembras son algo más pálidas y que los machos son un poco más pequeños. Sin embargo, estas particularidades no suelen ser fiables.
El cuerpo del Hyphessobrycon amandae es plano a los lados.
Comportamiento: ¿puede convivir con otros peces?
En general, este pez es muy pacífico. Solo los machos pueden volverse un poco territoriales en época de reproducción. Si tus peces están solos, se refugiarán cada vez más.
Pueden convivir con animales pequeños y pacíficos, como las gambas (incluidas las enanas) o los siluros (p. ej., loricáridos o corydoras). Si el acuario tiene poco espacio, es mejor no mezclarlos con otros peces a los que les guste la amplitud, como las danioninas.
Tenencia: ¿qué hay que tener en cuenta?
El Hyphessobrycon amandae es un pez gregario y necesita obligatoriamente estar en contacto con sus congéneres. Nadan en bancos de unos diez peces por su territorio y, como nadadores activos que son, aprecian su vida submarina. En cuanto a la composición del grupo, es mejor que haya más hembras que machos.
Tamaño del acuario
Para que los peces puedan moverse libremente por el acuario, este debe tener capacidad para 30 litros de agua como mínimo. Con un acuario más grande, de entre 50 y 80 litros, serán aún más felices.
Valores del agua ideales
La salud de tus peces depende en gran medida de la calidad del agua del acuario. El Hyphessobrycon amandae despliega todo su esplendor cromático con estos valores del agua:
Dureza total: 2-12 °dH
Dureza de carbonatos: 2-8 °KH
Valor de pH: 5,5-7,5
Temperatura del agua: 23-29 °C
Plantas de acuario
Para el Hyphessobrycon amandae es muy importante contar con espacio libre para nadar. Por eso, no debes poner demasiadas plantas en el acuario. Sin embargo, las plantas acuáticas les ofrecen suficiente protección y sitios donde esconderse.
Puedes utilizar un sustrato oscuro que resalte todavía más la belleza de tus peces.
El Hyphessobrycon amandae es un pez gregario que recorre su territorio en bancos pequeños.
Cría: consejos y procedimiento
No siempre se pueden criar peces propios en el acuario. De hecho, en el caso del Hyphessobrycon amandae, esta cría es más bien cosa de expertos.
Consejos para la cría
Si quieres probar suerte, toma nota de los consejos siguientes sobre el recipiente de cría:
Coloca plantas finas en el recipiente (p. ej., musgo de java).
La dureza global debe ser inferior a 5 °dH (agua blanda) y el pH, de entre 5,6 y 6,5.
Para la cría, utiliza una pareja o un macho y varias hembras.
Procedimiento tras el desove
Si la hembra ha desovado hasta 100 huevos, debes sacar a los padres del recipiente para proteger los huevos. En efecto, el Hyphessobrycon amandae es un depredador de huevos. Ajusta la temperatura a entre 22 y 24 grados para que las larvas salgan del huevo uno o dos días después.
Si las larvas se convierten en alevines ágiles a los pocos días, ya puedes alimentarlos con comida en polvo, paramecios y artemias jóvenes.
Alimentación: ¿qué come el Hyphessobrycon amandae?
La mayoría de especies de carácidos son omnívoras y el Hyphessobrycon amandae no es ninguna excepción. En lo que a su alimentación se refiere, no presenta complicación alguna. Además de los copos convencionales, también le gusta el alimento vivo y congelado, como artemias, copépodos o larvas de mosquito.
El Hyphessobrycon amandae tiene una esperanza de vida media de dos o tres años.
Curiosamente, la coloración es un indicio importante del estado de salud de los peces. Si presentan un rojo vivo, este es un signo de que se encuentran bien.
El hábitat natural del Hyphessobrycon amandae se encuentra en las profundidades de Brasil. Estos peces están en su salsa en las regiones donde se abren camino por la flora los turbios afluentes de los ríos Araguaia y das Mortes. Los afluentes de aguas blancas del estado de Mato Grosso se caracterizan por un color entre azul y verde.
Compra: ¿cuánto cuesta?
Por un precio de dos a cuatro euros por ejemplar, puedes formar todo un banco de peces por poco dinero. Si aún no tienes un acuario equipado, deberás contar con los costes de adquisición del acuario, el equipamiento y los gastos corrientes de comida.
Encontrarás ejemplares de Hyphessobrycon amandae en cualquier tienda de animales grande con departamento de acuariofilia. También puedes comprarlos por internet, pero fíjate bien en la salud y la procedencia de los peces.
Conclusión: ¿es apto para mi acuario?
Estos pequeños carácidos son seres muy sociables y cordiales. Además, son fáciles de cuidar y gozan de buena salud. Con una tenencia y una alimentación acordes a la especie, serán el blanco de todas las miradas en el acuario. Aunque este pez es apto para principiantes, su cría queda reservada a los acuaristas experimentados.
La tenencia de peces ornamentales está en auge, y no es de extrañar, pues la visión del colorido mundo acuático y sus tonalidades en tu propia sala de estar es fascinante, además de tener un efecto tranquilizador y relajante. ¿Pero cuáles son los peces de acuario ideales para ti? Aquí te presentamos las diez especies de peces de agua dulce favoritos.
De brillantes coloridos y un carácter algo agresivo hacia otros peces y semejantes, el pez betta, conocido también como el pez combatiente o luchador de siam, es un ejemplar muy especial, que aporta una fascinante nota de color a cualquier acuario. Es poco exigente, lo que hace que sea fácil de cuidar y muy popular entre aquellos principiantes en la acuariofilia.
El guppy es uno de los peces de acuario de agua dulce más populares del mundo. Se reproduce sin problema alguno, incluso estando en confinación, es fácil de cuidar y por eso es ideal para principiantes en la acuariofilia. Es un colorido pez al que no le afectan las pequeñas negligencias. Estos activos animalitos se ven en gran diversidad formas y colores.
