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El paludario, una combinación de acuario y terrario, permite crear paisajes extraordinarios.
¿No te decides entre tener animales terrestres o acuáticos en tu casa? En ese caso, un paludario es la solución ideal, ya que combina las ventajas de los acuarios y los terrarios. Descubre quién puede vivir en él y que necesitas para instalar uno.
Un paludario es una combinación de acuario y terrario. Por eso, también recibe el nombre de acuaterrario. El nombre paludario proviene de la palabra latina palus, que significa pantano.
De manera similar a un paisaje pantanoso, en esta miniversión hay una orilla con abundante vegetación y una parte que se encuentra bajo la superficie del agua. Si el paludario se concentra más en la zona acuática que en la terrestre, se habla de ripario. Aquí, el objetivo es imitar la zona ribereña de lagos o ríos y solo insinuar la zona sobre el agua.
Dado que el paludario, básicamente, es un terrario con agua, las condiciones predominantes son selváticas. Por eso, la humedad del aire, del 70-80 %, es bastante superior a la de un simple terrario.
Los habitantes típicos son anfibios o reptiles exóticos que habitan tanto el agua como la tierra. Por ejemplo, pueden ser ranas, tritones, tortugas pequeñas o salamandras.
Dato interesante: hay quienes construyen su paisaje pantanoso por niveles, aprovechando el desnivel para integrar pequeñas cascadas. Por eso, a veces se habla de acuarios cascada.
Antes de comprar e instalar un paludario, conviene que te familiarices con sus particularidades. Como con un paludario se reproducen dos hábitats naturales de animales y plantas, debes conocer las peculiaridades de los acuarios y los terrarios.
La clave está en recrear las mejores condiciones posibles en ambos mundos para los animales y las plantas. Por eso, un paludario siempre requiere cierto esfuerzo. La alta humedad y la limpieza del miniecosistema constituyen todo un desafío.
No obstante, con un poco de tiempo y tacto no deberías tener problemas para crear un equilibrio ecológico que disfrutéis tanto tú como los habitantes de tu nuevo mundo. El esfuerzo se verá recompensado por una diversidad fascinante.
En función de los habitantes que elijas, crearás paisajes únicos. La vegetación, el sustrato y la proporción de agua respecto a la ribera dependen en gran medida de los animales.
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Para instalar un acuaterrario, necesitarás conocimientos de acuariofilia y terrariofilia, un recipiente adecuado y accesorios. En las tiendas especializadas hay recipientes de cristal especiales para paludarios, tanto abiertos como cerrados. Dado que la humedad en el paludario es muy alta, los sistemas cerrados son más recomendables.
Consejo práctico: si ya tienes un acuario y estás pensando en modificarlo, puedes usarlo como base para un minipaludario.
Las plantas proporcionan una elevada calidad del agua y sus raíces constituyen un refugio estupendo para los animales. Además, como llegan hasta la región subacuática, también eliminan muchas sustancias nocivas del agua.
No obstante, el agua se tiene que filtrar igual que en un acuario. Para crear una cascada, también necesitarás bombas. Las cascadas no solo aportan movimiento al paludario, sino que también aumentan la humedad.
Otro elemento que no debe faltarte es la luz. Para la iluminación puedes guiarte por los acuarios, pero todo depende de las preferencias de los animales y plantas. Por ejemplo, los reptiles necesitan luz ultravioleta y zonas calientes para calentarse y secarse.
Un paludario es adecuado para animales de hábitats cálidos y húmedos a los que les guste el agua. Por ejemplo, pueden vivir en él anfibios, reptiles, crustáceos y peces, siempre que el equipamiento esté adaptado a ellos.
Estos son algunos de los animales preferidos para paludario:
Si quieres tener varias especies, infórmate bien primero sobre sus respectivas preferencias y necesidades. Así, averiguarás quién puede convivir con quién, quién se comería a quién y quién es mejor tener separado.
Otro requisito importante para el bienestar de los animales del acuaterrario es el nivel del agua. Este se debe orientar a las necesidades de las especies que tengas. También por eso es recomendable que el número y la variedad de animales sean manejables.
Al igual que los animales, las plantas también crecerán con todo su esplendor si les gusta la humedad. Básicamente, se puede utilizar cualquier planta que se pueda tener en un acuario.
Los helechos son eficaces para la tierra y el musgo de Java también es un buen complemento. Con un poco de pericia y la tecnología correcta, puedes plantar orquídeas en las condiciones idóneas para decorar el paludario.
Tanto si montas un acuario, un terrario o una mezcla de ambos: cuando crees un pequeño ecosistema en casa, en él deben reinar las mismas normas que en la naturaleza. Exactamente como un paisaje pantanoso real, un paludario también es muy sensible a las influencias medioambientales negativas.
Aquí tienes unos consejos para que puedas disfrutar mucho tiempo de tu minimundo tropical:
Un paludario aúna lo mejor de los mundos de la acuariofilia y la terrariofilia. Iniciarse en el mundo de los paisajes pantanosos tropicales es más fácil si ya tienes experiencia con acuarios o terrarios.
Pero también los principiantes que busquen una afición emocionante se lo pasarán en grande montando y gestionando un paludario. El magazine de zooplus te ofrece consejos prácticos para el cuidado de tu miniecosistema y datos interesantes sobre sus habitantes.
Alimentar a los peces de acuario de manera natural y adecuada a sus necesidades, no debería suponer ningún problema si se siguen unas sencillas indicaciones. Te contamos cómo debe ser la alimentación para peces de acuario.
¿No te decides entre tener animales terrestres o acuáticos en tu casa? En ese caso, un paludario es la solución ideal, ya que combina las ventajas de los acuarios y los terrarios. Descubre quién puede vivir en él y que necesitas para instalar uno.
El que por fin ha cumplido su sueño de tener su primer acuario y ya ha dejado atrás lo que parece un periodo de tiempo demasiado largo para la puesta en marcha, arde en deseos de poblarlo con peces lo antes posible. Pero a la hora de comprarlos también hay que elegir aquellos que se adecúen a las características del acuario (parámetros del agua, etc.) y, por supuesto, que sean compatibles entre sí. Para ello, es fundamental documentarse mediante fuentes especializadas como libros o un experto en acuarios.
