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Las especies como los escalares enferman con mayor frecuencia de tuberculosis en peces.
La tuberculosis es una de las enfermedades de los peces más comunes. Las bacterias que la provocan están muy extendidas y se encuentran en muchos acuarios. Te explicamos cómo se produce la tuberculosis en peces y qué hacer para combatirla.
La tuberculosis en peces, causada por bacterias, es una de las enfermedades más comunes en los peces de acuario. Como puede matar a los peces afectados, en caso de sospecha hay que acudir al veterinario.
Prácticamente cualquier pez ornamental puede contraer tuberculosis, ya sea de agua dulce o de agua salada. No obstante, la enfermedad suele afectar a peces inmunodeprimidos. Al parecer, los guppies, siluros y escalares son más propensos que, por ejemplo, los carácidos.
La tuberculosis en peces se puede transmitir a las personas. Se la conoce como granuloma de las piscinas y va acompañada de erupciones cutáneas con picazón, sobre todo en las manos y brazos.
Si sospechas de un brote de tuberculosis en peces en tu acuario, no toques el agua infectada directamente.
Ponte guantes y nunca toques el agua si tienes heridas abiertas. Si te notas síntomas, ve al médico.
La tuberculosis en peces puede tener un curso lento, pero también explosivo. En función del estado inmunitario de los peces, pueden presentar síntomas, aunque no siempre.
El cuadro clínico no permite al propietario del acuario distinguir la tuberculosis de otras enfermedades. Por eso, es recomendable consultarlo con un veterinario.
El curso agudo de la enfermedad se manifiesta con inflamaciones repentinas y avanza en cuestión de una o dos semanas. Los síntomas siguientes aparecen en esta fase:
Además, los peces con tuberculosis presentan bultos de color gris blanquecino en casi todos los órganos (granulomas). No obstante, estos no son visibles hasta después de la disección.
En la mayoría de casos, la tuberculosis en peces aparece lentamente, por ejemplo, con un curso crónico. Solo unos pocos peces desarrollan bultos ocasionalmente en la musculatura. Por fuera, estos se ven como manchas oscuras.
Poco a poco, estos bultos estallan y liberan las bacterias al agua.
En cuanto detectes síntomas en tus peces, reflexiona sobre las condiciones de alimentación y tenencia. Además, deberás buscar a un veterinario especializado en peces.
El tratamiento oportuno de las enfermedades como la tuberculosis en peces puede salvar vidas y proteger a los demás peces.
Para diagnosticar la tuberculosis en peces con certeza, el veterinario suele realizar la disección de un pez muerto. En el corte histológico se observan los granulomas gris blanquecino típicos en el hígado, el bazo y los riñones.
A continuación, el veterinario envía muestras al laboratorio para que detecten los patógenos directamente.
No obstante, la presencia de bacterias o alteraciones tisulares no es una prueba definitiva de un brote de tuberculosis. Esto es así porque las bacterias pueden estar presentes en los peces de forma natural.
Por desgracia, actualmente no existe ningún medicamento contra la tuberculosis en peces. No obstante, con conocimientos de base sobre la enfermedad y las medidas correctas, puedes ralentizar el curso de la enfermedad y proteger a los peces sanos.
El remedio más eficaz contra nuevas infecciones es aislar a los peces enfermos. Además, a partir de ahora no debes introducir nuevos peces en este acuario para dejar que la población muera de forma natural y paulatina, y no contagiar a los peces nuevos.
A veces es necesario que el veterinario sacrifique a los peces con tuberculosis. De este modo, los salvarás de una muerte agonizante.
La tuberculosis en peces aparece por las bacterias del género Mycobacterium. Estas micobacterias están presentes en aproximadamente el ochenta por ciento de los acuarios. Se adhieren a la mucosa exterior de los peces, pero también se encuentran en el sustrato o en otros materiales.
Los peces sanos están protegidos contra las bacterias gracias a su mucosa intacta. En cambio, a los peces enfermos les falta este mecanismo de defensa. Los peces inmunodeprimidos tienen una mucosa alterada, por lo que las bacterias pueden reproducirse rápidamente.
Nota: La inmunodepresión suele deberse a una mala tenencia o alimentación, por ejemplo, si los peces ingieren insuficientes nutrientes, como vitaminas.
La tuberculosis en peces afecta con frecuencia a animales estresados. El estrés puede deberse, por ejemplo, a peleas por la jerarquía.
Otra causa pueden ser nuevos peces en el acuario o valores del agua erróneos, como una temperatura excesiva.
La tuberculosis en peces es altamente contagiosa. La transmisión no solo se produce de un pez a otro, sino también por contacto indirecto, por ejemplo, a través de un sustrato contaminado.
Por eso, la enfermedad puede desarrollarse como una epidemia y matar a toda la población de peces en poco tiempo.
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Según los conocimientos actuales (agosto de 2023), no existe ningún medicamento para curar a los peces con tuberculosis. Por consiguiente, un brote de la enfermedad suele ir asociado a la muerte de los peces, según el curso.
Las micobacterias pueden sobrevivir en el acuario mucho tiempo. Por este motivo, es frecuente que la tuberculosis en peces reaparezca. Las bacterias se adhieren firmemente a los sustratos, las plantas de acuario o los objetos de decoración.
Nota: Una vez muertos los peces enfermos, debes desinfectar y limpiar a fondo el acuario si quieres volver a usarlo. Lo mismo se puede decir de los objetos del acuario. Además, debes renovar todo el sustrato y las plantas.
Una buena prevención es la mejor manera de proteger a los peces de la tuberculosis. Con una tenencia y alimentación acordes a la especie, les proporcionarás un sistema inmunitario fuerte. Esto contribuirá a que puedan plantar cara a las micobacterias durante mucho tiempo.
Observa a los peces con regularidad en busca de alteraciones y comprueba los valores del agua para combatir las enfermedades infecciosas, como la tuberculosis.
Los peces nuevos son posibles portadores de agentes patógenos. Por eso es tan importante tenerlos dos o tres semanas en una pecera de cuarentena aparte.
Si, pasado este tiempo, parecen sanos y alegres, ya puedes añadirlos al resto de la población.
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