Resfriado en gatos: síntomas y tratamiento 

 En cuanto llega la época fría del año, muchos mininos presentan síntomas de resfriado. Pero ¿qué pasa si mi gato está resfriado? ¿Cualquier resfriado en gatos ya es la temida gripe felina? Sigue leyendo para averiguar todas estas cosas.

¿Es muy peligroso un resfriado en gatos?

Para los gatos adultos vacunados con un sistema inmunitario fuerte, un resfriado no suele ser grave. Con el descanso y las atenciones necesarios, los síntomas remiten a los pocos días. Es más peligroso cuando se resfrían los gatos jóvenes o inmunodeprimidos. Si hay complicaciones, como infecciones secundarias bacterianas o neumonías, un simple resfriado puede convertirse en una enfermedad mortal.

Síntomas: ¿cómo se detecta?

Los síntomas de un catarro en gatos no son muy diferentes de los nuestros. Los clásicos son estos:

• Secreción nasal y estornudos
• Tos y carraspera
• Secreción ocular y conjuntivitis
• Falta de apetito
• Malestar general
• Fiebre

Si el gato tiene fiebre o las secreciones nasales u oculares amarillentas, debes llevarlo urgentemente al veterinario. También debes hacerlo si lleva más de unos días con síntomas de resfriado.

Resfriado en gatos: ¿qué medidas diagnósticas existen?

El veterinario te hará preguntas para recabar información importante sobre la aparición del resfriado. Los datos sobre la vacunación, el origen y el entorno actual del gato sirven para descartar posibles diagnósticos diferenciales.

Durante la anamnesis, el veterinario explorará las constantes vitales del gato para determinar su estado de salud actual. A continuación, le hará un frotis de la nariz o los ojos para determinar los patógenos causantes de la enfermedad. En función de la gravedad de los síntomas, también pueden ser necesarios análisis de sangre y radiografías del tórax.

Tratamiento: ¿qué puedo hacer si mi gato está resfriado?

La mayoría de resfriados se curan con reposo y unas pocas atenciones por tu parte. Ofrécele en todo momento un rincón calentito y asegúrate de que beba mucha agua. Con alimentos muy sabrosos despertarás su apetito.

Sin embargo, si necesita tratamiento, este siempre se compone de una lucha específica contra la causa subyacente y una terapia sintomática coadyuvante. En función del patógeno, la terapia también puede estar compuesta por diferentes medidas:

• Tratamiento antiviral: medicamentos antivirales, como el aciclovir o el interferón
• Infecciones secundarias bacterianas: antibióticos después de un test de resistencia (en forma de pomada para los ojos o comprimidos)
• Ingesta de líquidos suficiente: goteo intravenoso y comida húmeda
• Medicamentos antitusivos o inhalaciones
• Antiinflamatorios

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Causas: ¿por qué se resfrían los gatos?

Normalmente, los virus son los responsables de un resfriado en gatos. Si el sistema inmunitario está debilitado por el frío, la lluvia, el estrés, una mala alimentación u otras enfermedades, el cuerpo del gato no puede luchar contra los virus. Si la cantidad de virus que infecta al gato es muy grande (por ejemplo, de otros gatos resfriados), su sistema inmunitario también pierde la batalla.

Las mucosas que atacan los virus devienen propensas al ataque de bacterias. Esto hace que un catarro acuoso inicialmente viral se convierta rápidamente en una secreción nasal purulenta. En el peor de los casos, el gato puede contraer una neumonía.

¿El resfriado en gatos es lo mismo que la gripe felina?

En el sentido literal, cualquier resfriado en gatos es una gripe felina. Sin embargo, los veterinarios describen la gripe felina como todo un complejo de diferentes virus y bacterias. Si el gato se infecta de uno o varios patógenos de este complejo, enfermará de la verdadera gripe felina. Se trata de una enfermedad infecciosa altamente contagiosa que no se puede comparar con un simple resfriado en gatos.

Lee más cosas sobre este tema en nuestro artículo sobre la gripe felina.

¿Cuál es el pronóstico?

La mayoría de resfriados en gatos son inocuos y desaparecen tan rápido como aparecieron. A pesar de esto, no debes tomarte a la ligera un resfriado crónico o recurrente. Hay muchas infecciones víricas que, de no tratarse, pueden provocar graves problemas de salud e incluso la muerte.

Profilaxis: ¿se puede prevenir?

En general, el catarro en gatos se puede prevenir con las medidas profilácticas siguientes:

• Limpieza regular del comederoy el arenero (p. ej., con altas temperaturas o productos de limpieza especiales)
• Evitar el contacto con gatos enfermos
• Limitar las salidas al exterior cuando llueva y haga frío
• Existen vacunas contra algunos patógenos del complejo de la gripe felina (p. ej., FHV-1, FCV y Chlamydophila felis). Aunque no evitan que el gato se infecte, pueden prevenir un brote de la enfermedad.