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Los síntomas de la senilidad en gatos ancianos son muy variados.
¿Te preocupa por qué tu gato anciano ya no responde a su nombre? ¿O te preguntas por qué ya no encuentra el comedero? Te explicamos cómo reconocer los síntomas de la senilidad precozmente en gatos ancianos. Además, te contamos cómo ayudar a los mininos a que vivan una vida larga y sana.
En general, los gatos alcanzan una edad media de unos quince años. Esto significa que algunos pueden vivir incluso más.
Sin embargo, la esperanza de vida real de un gato depende de sus genes y de su estilo de vida. También depende, lógicamente, del grado de senilidad que padezca. Cuanto más sano sea el modo de vida de un gato, más probabilidades hay de que los síntomas de senilidad sean más lentos. La realidad es que una alimentación deficitaria o errónea y las enfermedades subyacentes pueden acortarle la vida.
Dato interesante: el gato más viejo del mundo hasta la fecha, Creme Puff, alcanzó la imponente edad de 38 años según el libro Guinness de los récords. No obstante, esto es una absoluta rareza.
Signos típicos de senilidad
En comparación con los gatos jóvenes, los gatos ancianos llaman la atención por ciertos síntomas de senilidad. Estos signos empiezan a observarse a partir de los siete años y se dividen en indicios externos y cambios conductuales:
Cambios físicos
Un signo típico de la senilidad en gatos es la coloración gris-blanca del pelaje, especialmente en la cabeza. El pelo se torna más apagado y pierde brillo con la edad.
Con los años, el manto felino se enmaraña a menudo porque los gatos ancianos ya no pueden acicalarse tanto.
También se observa una pérdida de musculatura e inestabilidad postural. Las enfermedades asociadas a la edad, como la artrosis, también pueden influir negativamente en el exterior del gato.
Cambios de conducta
Es normal que los gatos mayores muestren comportamientos diferentes. Estos no son signos patológicos, sino que forman parte del envejecimiento:
Deambulación confusa a causa de la pérdida visual y auditiva
A los gatos ancianos no solo se los reconoce por los rasgos externos. También hay ciertas conductas que apuntan a una creciente senilidad.
¿Se puede prevenir la senilidad en gatos ancianos?
La edad de un gato se ve influida por dos factores: factores medioambientales y la edad heredada genéticamente. El factor hereditario solo se puede controlar con la cría específica. En cambio, tú puedes prolongar la esperanza de vida de tu minino con un estilo de vida saludable.
La alimentación correcta
Los gatos son carnívoros y necesitan una alta proporción de proteínas. Además, el aporte de vitamina A y taurina es esencial porque los gatos no pueden producir estas sustancias por sí solos. La arginina y el ácido araquidónico también son nutrientes importantes para una alimentación saludable y una edad longeva.
Suficiente ejercicio
El ejercicio es indispensable para que los gatos vivan una vida saludable, algo que la ciencia sabe desde hace tiempo. Esto no significa que el gato siempre deba practicar deporte de alto rendimiento. Si el gato puede pasearse por el vecindario, este suele ser ejercicio suficiente. En cambio, si tienes un gato de interior, puedes hacer que se mueva con juguetes y circuitos interesantes. De esta manera, puedes prevenir una senilidad precoz en gatos ancianos.
Chequeos periódicos
Muchos gatos ancianos sufren enfermedades sistémicas, como la diabetes o problemas renales. También son propensos a contraer enfermedades articulares, como la artrosis. Para poder detectar y tratar estas enfermedades lo más precozmente posible, es aconsejable visitar al veterinario periódicamente. Este podrá ayudar al minino, por ejemplo, con analgésicos.
Entorno libre de estrés
A diferencia de los gatos adultos, los gatos mayores tienen un sistema inmunitario debilitado. Si, además, están estresados, son más susceptibles a contraer infecciones y otras enfermedades. Esto puede hacer que la senilidad en gatos ancianos avance más rápido.
Asegúrate de que el entorno del gato esté libre de estrés y no adoptes otro animal ni hagas fiestas ruidosas. Si esto es inevitable, deberás recurrir a medidas antiestrés, como la aplicación de feromonas.
Ejercicios mentales
Que los gatos ancianos pierdan memoria es un proceso normal. Sin embargo, puedes ralentizarlo un poco ofreciéndole ejercicios mentales a tu gato. Los juegos de esconder comida y los juguetes de inteligencia pueden reforzar su rendimiento cerebral.
¿Qué pasa en el cuerpo con la senilidad?
Los seres vivos están compuestos por miles de millones de células. Cada célula tiene una función concreta en el cuerpo, según de qué tipo sea. Al dividirse, se reproducen y reemplazan las células muertas.
En los años de juventud, las células del cuerpo aún tienen mucha vitalidad. En cambio, con el paso de los años van perdiendo funcionalidad y esperanza de vida. Entonces llega la vejez.
A esto se añade la pérdida de funcionalidad de algunos órganos. Los más afectados son los riñones, el hígado y el cerebro. Por consiguiente, las funciones orgánicas mermadas son un signo de senilidad, como la pérdida auditiva o una micción más frecuente.
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