La alopecia en gatos puede aparecer a nivel fisiológico, debido al cambio de pelo estacional, o a nivel patológico. Los parásitos, los trastornos hormonales o las alteraciones hereditarias de la formación capilar son algunos ejemplos de causas de alopecia. Si has pensado alguna vez «a mi gato se le cae el pelo», continúa leyendo para descubrir el porqué.
¿Cómo aparece la pérdida de pelo en gatos?
La alopecia no es una enfermedad en sí misma, sino un signo de otra enfermedad. Para resumir las posibles causas, esta puede dividirse en caída del pelo real (por causas no condicionadas por el picor) y caída del pelo aparente (por picor y rascado):
1. Causas no condicionadas por el picor:
- Trastornos hormonales: la formación del pelo tiene tres fases controladas por varias hormonas del crecimiento. Estas se ven afectadas, entre otras, por las hormonas de las glándulas suprarrenales o de la tiroides. Por eso, las enfermedades de estos órganos también pueden provocar la pérdida de pelo en gatos. El hipertiroidismo es una causa frecuente de la caída del pelo en gatos.
- Enfermedades hereditarias que provocan trastornos funcionales o estructurales de las raíces del pelo (p. ej., displasia folicular)
- Infecciones de la piel provocadas por bacterias (p. ej., estafilococos o estreptococos) y hongos (p. ej., Malassezia y dermatofitos)
- Tumores
- Estrés
2. Causas condicionadas por el picor:
- Ectoparásitos, como las pulgas, los ácaros del oído y los Demodex
- Reacciones alérgicas(p. ej., al polen, a los ácaros del polvo o a las arenas perfumadas)
- Las infecciones bacterianas y fúngicas pueden provocar la pérdida de pelo en gatos por el picor.
¿Qué otros síntomas aparecen, además de la pérdida del pelo?
Los gatos pueden presentar alopecia en todo el cuerpo o en zonas determinadas. Además, según la causa puede variar la forma, la extensión, el tiempo de ocurrencia (aguda o crónica) y la simetría. No es infrecuente que los gatos afectados presenten otros síntomas, en función de la enfermedad subyacente:
- La alopecia condicionada por el picor suele aparecer porque el gato se rasca y se lame intensamente las zonas afectadas.
- Los trastornos hormonales, como el hipertiroidismo, también suelen provocarle una pérdida de peso, aunque se aumente la ingesta de alimento. También se han observado dolencias gastrointestinales y un aumento de la actividad.
- Las infecciones bacterianas pueden estar acompañadas de exudados de heridas purulentos y, en casos graves, provocar una septicemia bacteriana mortal. En el curso de la infección, los gatos presentan un estado general deteriorado y fiebre alta.
¿Qué medidas diagnósticas existen?
Debido a las numerosas causas de la alopecia en gatos, es recomendable acudir al veterinario. Mediante preguntas sobre, p. ej., la profilaxis parasitaria actual, la alimentación o el comportamiento, puede recabarse información importante. Además, se preguntará sobre cambios de comportamiento repentinos o la aparición de otros síntomas (p. ej., diarrea, vómitos o cansancio).
Cuando el veterinario determine el estado de salud tras un chequeo general, puede examinar en profundidad (adspección) las zonas afectadas. Si, por ejemplo, detecta secreciones purulentas en la piel, esto puede ser signo de una dermatitis bacteriana (piodermatitis). Si los pelos solo están rotos, lo más probable es que se trate de alopecia condicionada por el picor.
Lamentablemente, el exterior no siempre señala la causa y, por eso, se necesita invertir más tiempo para confirmar el diagnóstico. Las medidas diagnósticas siguientes pueden resultar útiles:
- Un análisis sanguíneo permite detectar signos de inflamaciones, reacciones alérgicas, infestación parasitaria o enfermedades de diferentes órganos (como el hígado).
- Para dilucidar las reacciones alérgicas también se pueden realizar pruebas cutáneas (test intradérmicos) o de anticuerpos (in vitro). Además, las dietas de exclusión ayudan a diagnosticar alergias alimentarias.
- Las pruebas hormonales sirven para detectar trastornos endocrinos.
- Para evaluar el ciclo capilar puede emplearse un tricograma, observando pelos sueltos bajo el microscopio y analizando sus características posteriormente.
- Las capas de piel circundantes se pueden examinar con una biopsia para detectar células inflamatorias, bacterias y parásitos.
A mi gato se le cae el pelo, ¿qué puedo hacer?
Para poder solucionar el problema de la caída del pelo en gatos hay que atacar la causa:
- Las infecciones bacterianas suelen curarse después de limpiar la herida regularmente durante varios días. Los cursos más graves a veces requieren la administración de antibióticos en pomada o comprimidos, tras una prueba de resistencia.
- Las infestaciones parasitarias se pueden tratar con fármacos.
- La alopecia debida a una alergia a veces requiere la administración de preparados de cortisona. Además, eliminando el antígeno del entorno del gato se pueden reducir los síntomas.
- En función de la causa, los trastornos hormonales se pueden tratar con medicamentos o una intervención quirúrgica. El hipertiroidismo se puede mitigar, por ejemplo, con radioterapia con yodo.
- Las enfermedades tumorales requieren radioterapia o quimioterapia, según el tipo de célula. También pueden curarse con operaciones quirúrgicas.
¿Cuál es el pronóstico?
La caída del pelo en sí misma no es un problema grave para la mayoría de gatos. Sin embargo, el síntoma puede esconder enfermedades graves, por ello, el pronóstico depende mucho de la causa y la terapia. Si la enfermedad subyacente se puede combatir satisfactoriamente, las calvas suelen desaparecer rápidamente.
A mi gato se le cae el pelo, ¿puedo prevenirlo?
Algunas causas de la alopecia en gatos se pueden contrarrestar en una etapa temprana. Por ejemplo, se pueden utilizar collares especiales o pipetas como profilácticos parasitarios con piretroides contra ácaros, pulgas y garrapatas. Además, una alimentación equilibrada y un entorno adecuado ayudan a reducir el riesgo de enfermedades subyacentes.