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La protección de su peludo reviste la máxima prioridad para quienes tienen gato. ¿Tiene sentido contratar un seguro para gatos?
Para nosotros, contar con un seguro médico es obligatorio, pero ¿existen seguros para gatos? ¿Quién paga si el gato se hace daño en un piso de alquiler o en el exterior? Te explicamos si realmente vale la pena contratar un seguro para gatos.
Los españoles solemos tener seguro para nuestras pertenencias más valiosas: el coche, la casa, las joyas… En cambio, pocos pensamos en contratar un seguro para nuestros animales. En España se puede contratar un seguro para gatos, que puede incluir estas coberturas:
Daños al animal (accidentes, robo y extravío)
Asistencia veterinaria por enfermedad o accidente
Responsabilidad civil
Seguro gatos: protección con limitaciones
Cuando vas al veterinario con tu gato herido o enfermo, lo único que quieres es que se ponga bien. En ese momento, el dinero no importa. No es hasta que ven la factura que muchos se preguntan si tendría sentido contratar un seguro para gatos.
Análisis de laboratorio, castración, tratamientos de accidentes, resonancias, exámenes regulares con enfermedades crónicas… Los veterinarios ofrecen muchos servicios y estos tienen un precio. Cada vez más compañías aseguradoras prometen protección frente a los altos costes veterinarios y el mejor tratamiento para los gatos.
Con estos seguros de enfermedad, el gato adquiere el estatus de paciente privado. Como en un seguro médico para personas:
En general, el tomador asume los gastos veterinarios y después recibe el reembolso.
La prima del seguro depende de la edad y el estado de salud del gato.
La diferencia entre aseguradoras puede ser bastante grande.
¿Qué ofrece un seguro para gatos?
Con un seguro para gatos, tu minino obtiene la mejor atención en el veterinario que elijas o en una clínica. El seguro cubre una parte de estos gastos. En función de la aseguradora, la póliza cubre varios tratamientos, operaciones, chequeos, vacunas y desparasitaciones.
Sin embargo, hay limitaciones. Lo habitual es que las compañías solo cubran un importe determinado de prestaciones al año. También las hay que ofrecen un reembolso del ochenta o noventa por ciento. Esto significa que el tomador del seguro deberá aportar una cantidad concreta de cada factura.
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¿Cuánto cuesta?
Las primas de los seguros para gatos dependen del animal y de las prestaciones que cubran:
Edad del gato: muchos seguros rechazan gatos mayores que superen cierto límite de edad, aunque estén ágiles.
Raza: en algunas compañías, el seguro de un gato de raza es más caro que el de uno sin pedigrí.
Tenencia: el precio varía en función de si el seguro es para un gato de interior o de exterior. Las tarifas para gatos de exterior suelen ser más caras.
Prestaciones: cuantos más servicios quieras que incluya el seguro, más cara será la prima.
Contratar una cobertura total solo vale la pena si el gato es joven y está sano, al igual que con los seguros privados para personas. El coste de un seguro médico para gatos puede oscilar entre 5 y 30 euros al mes. Además, si tienes más de un gato, cada uno necesitará su propio seguro.
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Cosas a tener en cuenta al elegir el seguro
¿Estás pensando en contratar un seguro para gatos? Ten en cuenta los aspectos siguientes a la hora de elegirlo:
Elige un seguro para gatos sin franquicia o con una franquicia baja.
La prima debe prever un límite anual alto para las prestaciones.
Los veterinarios pueden llegar a cobrar importes muy altos en función de la dificultad del tratamiento. Asegúrate de que el seguro reembolse estos costes generosamente.
Lo habitual es que los seguros ofrezcan una cobertura anual de 1000 como máximo. Sería ideal encontrar un seguro que ofreciera una cifra más alta.
Cuidado con los periodos de carencia: las compañías de seguros no suelen pagar si el gato enferma poco después de contratar el seguro. Normalmente, prevén un periodo de carencia de entre quince días y tres meses. Para algunos tratamientos o la eliminación del cadáver, este periodo puede ser incluso de seis meses o un año.
Analiza bien las prestaciones que incluye el seguro y si cubre servicios básicos, como las vacunas.
Opciones: daños al animal, asistencia veterinaria y responsabilidad civil
Los seguros para animales domésticos son tan variados como las aseguradoras que los ofrecen. El seguro para gatos básico suele cubrir los daños que sufra el animal en caso de accidente. Además, el seguro paga al tomador en caso de robo o extravío del animal.
Coberturas ampliadas
Asistencia veterinaria por enfermedad
Hospitalización
Sin necesidad de reembolso en clínicas concertadas (el seguro paga directamente)
Servicio de consulta veterinaria
Responsabilidad civil
Los criterios a la hora de elegir la póliza más adecuada dependerán de la situación particular de cada uno/a. Examina bien la relación calidad-precio de cada seguro y averigua qué cubre y qué no.
¿Tu gato necesita un seguro de responsabilidad civil?
Los seguros que son realmente necesarios en la vida de una persona y un animal dependen de las circunstancias individuales. No obstante, con o sin gato, el seguro de responsabilidad civil es imprescindible. Ya solo un pequeño descuido en el día a día puede tener consecuencias graves y caras.
Los daños causados por las personas los cubre el seguro de responsabilidad civil privado. Si tu gato causa una desgracia, por ejemplo, matando los peces del estanque del vecino, estos daños los tienes que pagar tú. ¿Hay un seguro para gatos que te proteja de esto?
Antiguamente, el seguro del hogar incluía la responsabilidad civil por los daños ocasionados por los animales de compañía. Hoy en día, esto ya no es así. En España, solo la gente que tenga perros de razas PPP están obligados a contratar un seguro de responsabilidad civil. De hecho, solo Madrid y el País Vasco obligan a quienes tengan cualquier raza de perro a contratar dicho seguro.
Con la futura ley de bienestar animal, esto cambiará. Esta ley prevé que todo aquel que tenga un animal doméstico deberá contratar un seguro de responsabilidad civil. Así, estarás protegido/a frente a cualquier daño que ocasione tu gato.
Conclusión: ¿vale la pena un seguro para gatos?
Un seguro de responsabilidad civil privado siempre es aconsejable, con o sin gato. En cambio, si un seguro médico para gatos vale la pena o no depende de muchos factores: ¿cuánto cuesta el seguro? ¿Qué edad tiene el gato? ¿Cuánto puedes permitirte pagar en caso de un tratamiento caro?
Los seguros para gatos mayores y ciertas razas suelen ser bastante caros. Si adoptas un gato adulto de la protectora o quieres comprarte una raza menos robusta, sopesa bien los pros y los contras de estos seguros.
¿No quieres vincularte a un contrato, pero quieres darle los mejores cuidados posibles a tu gato? Piensa en cuánto puedes pagar mensualmente por la salud de tu gato y ahorra este importe en una cuenta aparte.
Cuando queremos a alguien deseamos que sea feliz y hacemos lo que está en nuestras manos para alimentar la felicidad de esa persona. Lo mismo sucede con nuestros fieles bigotudos, con los que compartimos el día a día. Al fin y al cabo, ellos también nos hacen felices a nosotros. Puedes estar seguro de lo siguiente: si le proporcionas a tu adorado minino una vida adecuada, conforme a su naturaleza y necesidades, estás haciendo un gato feliz. Esto incluye entretenimiento adecuado con juguetes idóneos, correspondientes a la inteligencia de la respectiva raza o naturaleza del gato en sí. Asimismo, una alimentación de buena calidad es muy importante
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