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El adiestramiento con clicker es un método de ejercicio y educación innovador para caballos y perros, pero también para gatos.
¿Quieres hacer que tu gato deje de marcar el sofá o enseñarle unos truquitos? En ese caso, combina el entrenamiento felino con el divertido adiestramiento para gatos con clicker, un método probado científicamente.
El clicker es un utensilio pequeño. Si aprietas el botón, el clicker chasquea como una rana clic clac de juguete. Este sonido se produce cuando la pieza metálica bajo tensión hace clic con el botón. Para que sean cómodos de utilizar, la mayoría tienen forma de gota.
Cuando elijas el clicker, asegúrate de que sea apto para tu gato. Los gatos tienen un oído muy fino, por lo que puede que algunos sean demasiado ruidosos para ellos. Prueba de antemano si el sonido le da miedo. Si reacciona con interés, pero relajado, el clicker es adecuado.
Pero ¿por qué comprar un clicker para gatos? ¿No es suficiente con un bien hecho para el adiestramiento felino? Desgraciadamente, la respuesta es que no.
La voz humana siempre suena diferente, en función de si uno está triste, contento, sano o resfriado. El oído del gato es muy sensible y el animal se da cuenta enseguida de que algo no va bien. En cambio, un clicker siempre suena igual.
Clicker prácticos para el adiestramiento felino
El adiestramiento para gatos con clicker es un método reconocido científicamente para varios animales domésticos, como caballos, perros y gatos. El objetivo es suavizar las conductas indeseadas y reforzar las deseadas con ejercicios específicos.
Algunos gatos pueden ser verdaderamente testarudos. Si el tuyo es así, puedes motivarlo a aprender con ayuda de un clicker para gatos. La clave es: si tu gato muestra la conducta deseada, pulsa el clicker a tiempo y recompénsalo con una deliciosa golosina. El método tiene por objetivo la recompensa, no los castigos ni la coacción.
Esto significa que, si tu gato no realiza la acción esperada, no hay consecuencias negativas. Las recompensas indican al gato que vale la pena participar en el adiestramiento. Así, puedes animar incluso a gatos que en general son muy vagos y obstinados.
Practica con tu minino regularmente para lograr estos objetivos:
Si tu gato muestra la conducta deseada, pulsa el botón y recompénsalo con una golosina. Esta es la teoría, pero ¿cómo se empieza?
El adiestramiento para gatos con clicker se debe realizar en un lugar tranquilo. Retira todas las fuentes de interferencia que puedan desviar la atención del minino. Ahora, haz que el gato se fije en el clicker. La idea es que entienda que el clic equivale a una recompensa inmediata. El tiempo de retardo máximo debe ser de solo dos segundos.
Es aconsejable empezar ya con el adiestramiento con clicker en la fase de impronta. Repite un ejercicio sencillo varias veces al día hasta que el gato conozca y asocie el clic con la recompensa. Los especialistas denominan a este principio condicionamiento clásico.
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Creas un estímulo neutro (el clic) y lo asocias con un amplificador primario (la golosina). Aquí va un ejemplo cotidiano para ilustrar este principio: ¿qué gato no corre al oír el crujido de la bolsa de comida?
Después del condicionamiento clásico viene el condicionamiento operante. Ahora, el gato debe asociar cierto comportamiento con una recompensa. Por ejemplo, la orden siéntate: en cuanto el gato se siente, di claramente ¡siéntate! y haz clic inmediatamente después. Ahora debes recompensarlo enseguida. Lo conseguirás sosteniendo un snack o un juguete sobre su cabeza. En general, los gatos se sientan en estas situaciones para ver mejor el objeto.
Otra opción es el capturing, que consiste en captar una conducta en la vida cotidiana. Ahora, tu gato aprende que, al ejecutar una acción determinada (en este caso, sentarse), recibe una recompensa después del clic. Esto provoca una experiencia de éxito y el minino realizará la acción cada vez más a menudo.
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Es muy importante calcular bien el tiempo. Si no recompensas al gato inmediatamente después del clic, no asociará el suceso con el ruido. Mantén la concentración y procura que tu tiempo de reacción sea bueno.
Si el gato deja de interesarse por el adiestramiento pasado un rato, haz una pausa. Y es que, cuando un gato dice que no, es que no. Demasiadas ambiciones solo llevan a la frustración. Haz muchas sesiones de entrenamiento cortas para no agobiar ni intimidar al gato.
El adiestramiento para gatos con clicker te ofrece muchas posibilidades. Por ejemplo, si a tu gato le da mucho miedo ir al veterinario, puede que el clicker te ayude a solucionar el problema. Hay otras situaciones estresantes que puedes manejar de forma lúdica para que tu gato se relaje.
Si tu minino muestra un comportamiento inadecuado y marca la casa, puedes quitarle esta costumbre jugando. Si tu gato se aburre, el adiestramiento para gatos con clicker puede ser una alternativa estupenda a los juguetes convencionales.
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