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Las vacunas para caballos normalmente se inyectan en el cuello por vía intramuscular.
Las vacunas también son muy importantes en la medicina veterinaria. Hay que proteger a los animales domésticos, caballos, etc., de las peligrosas enfermedades infecciosas. Te explicamos qué vacunas para caballos existen y cuáles necesita el tuyo.
Las vacunas para caballos son el medio más importante para los veterinarios contra las enfermedades infecciosas y su propagación. No solo se trata de la profilaxis de un animal concreto, sino también de toda la caballada.
Dicho en términos generales, una vacuna actúa creando una protección activa o pasiva:
Con la inmunización activa, el veterinario administra al caballo un antígeno muerto o vivo para que deba combatirlo activamente.
Con la inmunización pasiva sucede lo contrario. El veterinario inyecta al caballo anticuerpos específicos (p. ej., antitoxinas o inmunoglobulinas) dirigidos al agente patógeno. El inconveniente es que el sistema inmunitario equino no desarrolla una protección a largo plazo con este tipo de vacuna.
En España no existe ningún organismo que regule las vacunas para caballos ni su obligatoriedad. Sin embargo, los caballos de competición debe atenerse a las normas de la Real Federación Hípica Española. En el reglamento de la federación se estipulan las vacunas obligatorias para participar en las competiciones.
En otros países, como Alemania, sí que existen pautas oficiales y comisiones regionales. Lo mejor es que pidas información y consejo a tu veterinario.
Las vacunas para caballos core son aquellas que todos los caballos deberían recibir. Entre ellas figura la de la influenza equina (VIE), los herpesvirus equinos (EHV) y el tétanos.
Los herpesvirus equinos de tipo 1 y 4 (EHV-1 y EHV-4) son de las enfermedades infecciosas víricas equinas más importantes. Los caballos infectados del EHV-1 pueden sufrir un aborto en las yeguas o trastornos neurológicos. En cambio, una infección del EHV-4 provoca problemas respiratorios, entre otros síntomas.
En España existen varias vacunas contra los herpesvirus en caballos. La vacuna inactivada engloba los virus EHV-1 y EHV-4. Sin embargo, también existe una vacuna viva monovalente que solo cubre el EHV-1.
En varios estudios se ha demostrado que la administración de vacunas vivas proporciona una buena inmunidad de grupo. No obstante, para ello hay que vacunar a todos los animales de la caballada y cumplir las normas de higiene.
La influenza equina (gripe equina) es una enfermedad vírica de los caballos muy temida. Los virus varían según sus características y, por eso, los veterinarios los clasifican. En España se han detectado casos del subtipo H3N8.
Las vacunas para caballos constituyen el medio más importante para combatir la influenza equina. Como los antígenos son variables, la vacuna también cambia según el gremio de expertos de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).
Actualmente existen varias vacunas homologadas en España, algunas de ellas inactivadas y una con vector recombinante. Esta última es de momento la única que contiene antígenos de las cepas exigidas por la OIE.
El tétanos es la consecuencia de la neurotoxina tetánica (tetanoespasmina). Esta libera la bacteria Clostridium tetani, cuyas esporas se encuentran en el ambiente en todo el mundo.
Si un caballo pisa un clavo, el patógeno puede llegar a su organismo. Esta enfermedad mortal provoca parálisis espásticas de la musculatura.
Para proteger a tu caballo, debes vacunarlo contra el tétanos. En España hay varios toxoides tetánicos homologados que proporcionan una inmunidad duradera. Después de la inmunización básica, el intervalo para las vacunas de recuerdo dependerá de la vacuna inoculada. En general, este intervalo es de entre uno y tres años.
Una alternativa es el suero hiperinmune, compuesto por el toxoide y un antisuero. Proporciona una protección inmediata, pero requiere un test rápido antes de volver a administrarlo debido a un posible efecto alérgeno.
Sin una inmunización básica, los caballos no están perfectamente protegidos contra las enfermedades infecciosas anteriores. La inmunización básica para caballos consiste en tres vacunas core contra el VIE, el EHV y el tétanos.
El esquema de vacunación siguiente indica en qué momento hay que inocular cada vacuna a un potro:
| Edad | Vacuna |
| 6 meses | VIE, EHV, tétanos |
| 7-7 ½ meses | VIE, EHV, tétanos |
| 12-14 meses | VIE, EHV |
| 19-21 meses | Tétanos |
Consejo importante: los potros de yeguas no vacunadas que ingieren demasiado poco calostro deben recibir la primera vacuna contra el VIE, el EHV y el tétanos a partir de los cuatro meses. Lo mismo sucede para los potros con un nivel de anticuerpos bajo.
El esquema siguiente muestra cuándo hay que renovar las vacunas para caballos:
| Intervalo | Vacuna |
| Cada 6 meses | EHV |
| 7-7 ½ meses | VIE, EHV, tétanos |
| Cada 2-3 años | Tétanos |
Las yeguas embarazadas siguen otro esquema más. La vacuna viva del EHV-1 puede ponerse entre el cuarto y quinto mes y, adicionalmente, el octavo mes del embarazo.
Otra opción es administrar una vacuna inactivada contra los tipos 1 y 4 entre el quinto y séptimo mes, y el noveno mes.
La vacuna contra el VIE en yeguas embarazadas se inocula entre el cuarto y quinto mes, y entre el décimo y el undécimo.
Además de las vacunas para caballos mencionadas, hay otras maneras de proteger a tu caballo de las enfermedades infecciosas. Por ejemplo, algunas vacunas no core combaten las infecciones de rotavirus equino, la arteritis viral equina (AVE), las dermatomicosis, la adenitis equina, la enfermedad de Lyme, la rabia y las infecciones del virus del Nilo Occidental.
Pide asesoramiento al veterinario. Él te ayudará a encontrar la mejor solución para tu caballo.
Antes de homologar una vacuna, esta debe pasar por varias fases. Los laboratorios responsables comprueban la eficacia prometida y los posibles efectos secundarios. En general, se supone que las vacunas homologadas tienen una eficacia demostrada.
El veterinario te explicará los efectos secundarios. Además, los encontrarás en el prospecto del medicamento con la frecuencia estadística. Por este motivo, no se puede generalizar en cuanto a los efectos secundarios.
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