El barock pinto es una raza relativamente nueva que surgió de un cruce entre frisón y el antiguo pinto Gelderland. Se caracteriza por un aspecto imponente y un temperamento sereno.
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El barock pinto puede ser de varias combinaciones de colores.
El barock pinto, o pinto barroco, es un caballo mediano con una altura de cruz de entre 1,50 y 1,62 metros. Tiene una constitución fuerte y musculosa, aunque elegante y proporcionada. Llama la atención la crin y la cola largas, así como las densas cernejas de las cuartillas.
El dibujo del pelaje del barock pinto es extremadamente variable. Existen manchas de varias combinaciones de colores, sobre todo negro-blanco y marrón-blanco. También varía el tamaño de las manchas. Los patrones típicos son el overo y el tobiano. En el overo, la transición de blanco a color es irregular, mientras que los bordes del tobiano están claramente delimitados.
A nivel estético, el barock pinto recuerda a su antepasado, el frisón. Por este motivo, también lo llaman frisón pío o frisón colorido.
El barock pinto es famoso por su carácter manso y cariñoso. Es muy apegado a las personas y le encanta que le regalen atenciones. Además, suele mostrarse pacífico y sereno con otros caballos.
En relación con su temperamento, es más bien tranquilo. No tiende a sobreexcitarse ni a ponerse nervioso, lo que lo hace ideal para jinetes de cualquier nivel.
Por su serenidad, es un buen caballo de paseo para todas las edades y de doma clásica de alto nivel.
Sin embargo, no hay que olvidar que cada caballo es un mundo y el barock pinto también puede mostrar características diferentes según su formación y experiencia. Por eso, es importante adaptarse a cada animal y respetar sus necesidades.
Básicamente, el cuerpo fuerte y musculoso el barock pinto y su serenidad lo hacen apto para muchas disciplinas.
Es particularmente popular en la doma, donde da la talla por su talento para la reunión y sus movimientos elegantes. Sus marchas expresivas y dinámicas lo convierten en el candidato ideal para la alta escuela y el espectáculo ecuestre.
En los deportes de enganche, el barock pinto también sorprende por su fuerza y agilidad. En cambio, no es tan apto para el salto ni el concurso completo por su constitución pesada.
No obstante, cabe recalcar que la aptitud de un caballo para una disciplina concreta no solo depende de su raza. Hay otros factores, como la formación, la salud y el talento, que también influyen.
Siempre es recomendable valorar el potencial de un caballo individualmente y fomentarlo como corresponda, independientemente de su raza u origen.
Si tienes o quieres tener un barock pinto, debes saber algunas cosas sobre la tenencia y cuidados de esta raza. Estos son algunos de los aspectos a tener en cuenta:
En términos de salud, el barock pinto es en general muy robusto y resistente. No obstante, existen algunas enfermedades típicas de la raza que hay que conocer.
Por ejemplo, es frecuente que nazcan potros con hidrocefalia. Debido al tamaño desproporcionado de la cabeza, el parto se complica, por lo que muchos nacen muertos o hay que sacrificarlos directamente.
También se observan casos de enanismo con frecuencia en esta raza. Los músculos de los animales afectados están subdesarrollados y su esperanza de vida es mucho más corta.
Además, el barock pinto puede sufrir enfermedades equinas típicas, como cólicos e irritación del menudillo. Para prevenir estos problemas de salud, conviene controlarle el peso.
Esta raza es relativamente joven. Surgió en la década de 1950 en los Países Bajos por el cruce entre yeguas frisonas y antiguos pintos Gelderland. Se considera que el padre de la raza fue el semental Bonte Nico.
Actualmente también se cruzan otras razas, como el lusitano, el andaluz, el bereber, el gypsy vanner y el lipizzano.
Los caballos barrocos son aquellos cuyo origen se encuentra en el Barroco o que se asemejan al ideal equino de la época. Se desea una constitución compacta y cuadrada con una cabeza elegante, orejas pequeñas y ojos grandes y expresivos.
Además, es típico de ellos el cuello fuerte y el cuarto trasero musculoso.
El término pinto viene de nuestro idioma y hace referencia a las manchas. Por lo tanto, un barock pinto es un caballo de tipo barroco con manchas.
Según el objetivo de cría, todos los caballos de esta raza deben ser bicolores. Si un ejemplar presenta una sola mancha diferente del color de base, esta debe ser al menos de 500 centímetros cuadrados. También se admiten caballos negros con dos marcas blancas como mínimo.
Si quieres comprarte un barock pinto, debes prestar atención a su procedencia. Averigua más cosas sobre su origen y sus antepasados. Además, los resultados de torneos o pruebas pueden ofrecerte información sobre su rendimiento.
Presta también atención al temperamento del animal, especialmente si quieres utilizarlo para practicar deporte o actividades de ocio.
Asimismo, es importante comprobar su estado de salud antes de comprarlo. Un veterinario puede ayudarte en este sentido realizando pruebas para asegurarse de que está sano.
El precio de un pinto barroco adulto bien formado es de 5000 euros o más. Un potro de un año se puede conseguir a partir de unos 2000 euros.
Si buscas un caballo que no solo sea bonito, sino también manso y apto para varias disciplinas, vale la pena echarle un vistazo al barock pinto.
Este caballo no solo llama la atención, sino que también es cariñoso y fiel. Ya sea doma clásica, enganche o paseo, el barock pinto lo puede todo.
| Breve presentación: | Sangre templada con manchas y una gran similitud con el caballo frisón. Caballo sencillo con nervios de acero, una salud de hierro y una gran resistencia |
| Alzada: | 150-162 cm |
| Colores: | Sobre todo, negro y blanco, y marrón y blanco |
| Dibujo: | Patrón overo o tobiano |
| Marcha: | Expresiva y dinámica, con alta acción de rodillas |
| Origen: | Países Bajos |
| Aptitud: | Doma clásica, alta escuela, enganche y paseo |
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