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Hay muchas enfermedades de los loros que no se detectan a primera vista.
Hay muchas enfermedades que pueden afectar a los loros, periquitos y Cía., y que debes conocer si tienes un ave. Solo si tenemos los conocimientos básicos correspondientes podemos proteger a los loros de posibles enfermedades. Sigue leyendo para conocer las enfermedades de los loros más comunes.
La aspergilosis es una de las enfermedades de los loros más conocidas. El loro inhala a través del aire las esporas del hongo Aspergillus fumigatus, presentes en el entorno. A continuación, llegan al aparato respiratorio y forman ahí una peligrosa capa fúngica.
Habitualmente, los loros afectados padecen problemas respiratorios (respiración con el pico abierto…) y, a veces, síntomas neurológicos (espasmos o temblores…).
Una vez detectada la aspergilosis, p. ej., con una radiografía, el veterinario inicia el tratamiento con antimicóticos. El éxito de la terapia depende de la magnitud de la infestación.
La psitacosis es una de las enfermedades de los loros más importantes. En España no es una enfermedad de declaración obligatoria. Sin embargo, los brotes epidémicos producidos por cualquier causa con implicaciones comunitarias se deben notificar al Sistema de Vigilancia Epidemiológica de cada Comunidad Autónoma. Es una enfermedad infecciosa provocada por la bacteria Chlamydia psittaci.
Las clamidias llegan al cuerpo de varias especies de aves por distintas vías y provocan síntomas similares a la gripe.
Sin embargo, esta patología puede afectar a otros animales y a las personas. También se conoce como ornitosis.
El veterinario envía muestras al laboratorio, que cultiva las bacterias o las detecta con técnicas de biología molecular. Si el laboratorio confirma la sospecha, el veterinario le administra antibióticos al pájaro. Además, deberás seguir las instrucciones del veterinario para combatir la enfermedad.
Los herpesvirus provocan la enfermedad de Pacheco en papagayos. Si el pájaro se contagia de los virus por el aire o el pico, estos infestan muchos órganos a través de la sangre. La mayoría de loros o papagayos no enferman hasta que sufren estrés. En ese momento se manifiestan los síntomas, pero las aves suelen morir en cuestión de días.
Antes de morir, los pájaros tienen malestar general y desórdenes gastrointestinales. Por lo tanto, los veterinarios tienen un margen de tiempo muy escaso para detectar los virus con muestras de hisopo. Por eso, el diagnóstico suele realizarlo un patólogo.
Los loros y los periquitos contraen la PBFD, una enfermedad mortal, a través de una infección por gotículas de circovirus. Estos se adhieren a los folículos de las plumas, la piel, el esófago y el buche. En función de la edad del pájaro, este enferma en forma hiperaguda (brote extremadamente rápido), aguda o crónica.
La PBFD hace que las plumas y los huesos de los pájaros sufran alteraciones. Si el veterinario ha detectado los circovirus con un test PCR, solo puede administrar medicamentos coadyuvantes, como analgésicos o vitaminas. Por desgracia, todavía no hay cura para esta peligrosa enfermedad.
Los investigadores aún no han podido hallar la causa exacta de la enfermedad de dilatación del proventrículo (PDD) en pájaros. Sin embargo, sospechan que los bornavirus son los causantes de esta enfermedad neurológica mortal.
Los loros, papagayos y otras especies se contagian por el contacto con heces o polvo de plumas contaminados. En el cuerpo, los bornavirus aviares hacen que el tejido nervioso se inflame.
Los pájaros infectados pierden peso gradualmente y sufren una muerte aguda cuando se desgarra el proventrículo. Las dos características típicas de la PDD son la dilatación del estómago y el adelgazamiento de la pared estomacal. Dado que no existen remedios para esta enfermedad, el veterinario recurre a medidas coadyuvantes.
Los poliomavirus afectan principalmente a los periquitos, por lo que no pertenecen a las enfermedades de los loros en sentido estricto. Sin embargo, hay veterinarios que han informado de casos en algunas especies de loros (p. ej., guacamayos escarlata o loros eclectos). Se infectan por el contacto con heces o polvo de plumas contaminados. A continuación, los virus llegan al sistema nervioso, la piel y los órganos internos (p. ej., el hígado) a través de la sangre.
El curso y los síntomas clínicos de una infección de poliomavirus dependen en gran medida de la edad del pájaro. Con varias muestras, el veterinario puede detectar los virus directa o indirectamente. Tampoco existe cura para los poliomavirus, por lo que lo único que pueden hacer los veterinarios es paliar los síntomas.
Las plumas de las aves no se pueden reparar, por lo que se deben cambiar por otras nuevas. En función de la especie, el curso y la duración de la muda de plumas en aves varía. El descanso y una buena alimentación son indispensables en esta época.
Existe gran cantidad de especies de ácaros que afectan a los pájaros. La mayoría pasan desapercibidas, pero otras pueden provocarles síntomas graves. Te explicamos cómo detectar y tratar los ácaros en pájaros.
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